Los problemas económicos que atraviesa el Ministerio de Defensa son tales que este departamento fue uno de los afortunados en el decretazo 10/2013, del pasado 26 julio, por el que se concedieron dos créditos extraordinarios y un suplemento de crédito con cargo a los Presupuestos Generales del Estado del presente año. Respectivamente, la cartera que dirige Pedro Morenés recibió 877 millones de euros para cubrir compromisos de gasto correspondiente a ejercicios anteriores, mientras que al Ministerio de Industria, Energía y Turismo se asignaron 70 millones para el Plan PIVE-3. Por su parte, Empleo y Seguridad Social podrá disponer de otros 5.850 millones para atender obligaciones del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
El Congreso de los Diputados, gracias a la mayoría absoluta de los populares, aprobó la concesión de estas dotaciones extraordinarias en el último punto del orden del día del Pleno que acogió el Senado para atender la comparecencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sobre su relación con el extesorero del PP Luis Bárcenas. Si bien quedó acreditado que en el Ministerio de Defensa no disfrutan de solvencia económica, la letra pequeña de contratos que sigue realizando este departamento parece indicar lo contrario. El Boletín Oficial del Estado (BOE) recogía en su edición de este martes el anuncio de Defensa para la inminente licitación en la Base Aérea de Zaragoza del “mantenimiento integral de las instalaciones deportivas de precisión: campo de golf, zonas de prácticas y jardines aledaños al edificio de la oficina de las instalaciones”. La convocatoria de este contrato prevé un desembolso de 89.400 euros y señala que el plazo de ejecución del mismo se prolongará por un año.
Las empresas candidatas a la oferta de la Base Aérea de Zaragoza, de 62.300 metros cuadrados de calles, deberán aportar programas de “fertilización, tratamientos fitosanitarios, de riego, siegas y mantenimiento de la maquinaria”
Según consta en la documentación oficial de la Jefatura de la Sección Económico-Administrativa 26 del Ministerio de Defensa, las tareas de “paisajismo” consisten en “mantener la vegetación implantada (césped, árboles, arbustos, jardinería y vallados) en el estado más saludable posible, para presentar las instalaciones en perfecto estado de uso y juego en todo momento”. En concreto, las empresas candidatas deberán aportar programas de “fertilización, tratamientos fitosanitarios, de riego, siegas y mantenimiento de la maquinaria”. Entre las instrucciones que se dan para “cortar el césped” figura que la siega en las zonas de greens y anillos se realice entre tres y cinco veces por semana.
El campo de golf de la Base Aérea de Zaragoza consta de 9 hoyos y 18 salidas, 62.300 metros cuadrados de calles, 3.500 de greens, 26.500 de rough (terreno no segado, hierba alta o maleza) y 6.500 de tees (inicio del juego). Los greens están protegidos por 30 búnkeres y un obstáculo de agua que cruza el par cinco. Unas instalaciones de las que no hacen uso todos los militares de la base, según fuentes del Ejército del Aire.
Asimismo, para la ejecución del expediente se requiere un equipo compuesto por un director de mantenimiento, un encargado, un greenkeeper con experiencia mínima de cinco años en campos de golf de la zona climática continental y el número de jardineros que la empresa estime necesarios.
El pliego que establecía las condiciones técnicas para la adjudicación del contrato fue firmado el pasado 12 de junio. Apenas dos días antes de que también se elaborara otro para igual objeto pero distinta sede: la base aérea de Cuatro Vientos (Madrid). El anuncio del mismo fue publicado en el BOE del 25 de julio. En este caso, el Ministerio de Defensa abre concurso a fin de obtener los “servicios necesarios para el mantenimiento integral del campo de golf, escuela de golf, campo de prácticas y viveros del Centro Deportivo y Sociocultural del Ejército del Aire (C.D.S.C.E.A) Barberán y Collar”. Igualmente, los trabajos van dirigidos a la “conservación en perfecto estado de las instalaciones y su limpieza, así como de toda la red de riego y equipo de bombeo, incluidos los repuestos”. Su importe asciende a 260.000 euros y el plazo de ejecución comprende 2013-2014.
Este campo de golf posee igualmente 9 hoyos, aunque con amplio arbolado a lo largo del recorrido. Sus dimensiones son mayores que el de la base área de Zaragoza: 139.000 metros cuadrados de calles, 7.100 de greens, 10.650 de tees y 50.000 de rough. En este contrato, el personal requerido es, a priori, más numeroso y lo forman un director de mantenimiento, un encargado, un greenkeeper, seis jardineros expertos, un mecánico y un fontanero.
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