Cataluña tiene un serio problema con las okupaciones y los allanamientos de morada. El 42% de estos delitos que se producen en España se perpetran allí, según datos del Ministerio del Interior a los que ha tenido acceso Vozpópuli. Una situación que no mejora con el paso de los años más allá de seguir la tendencia del país: todas las comunidades autónomas, salvo Canarias (+14), Baleares (+3), Asturias (+1) y La Rioja (+1) están reduciendo el número de estos delitos.
Aunque el problema se suaviza -en Cataluña, en el primer trimestre de 2021, hubo 1.966 okupaciones y allanamientos; 1.673 en 2023- la realidad es que Cataluña triplica el número de okupaciones y allanamientos que se producen en Andalucía, la segunda comunidad donde más se producen estos delitos y que además posee una población mayor.
El mayor foco es Barcelona. A falta de datos de 2023, sí se puede observar que la mayoría de estos delitos se perpetran en la ciudad. Cerró el año 2022 con un total de 1.313 okupaciones de las 6.546 totales, lo que equivale a un 20% del total catalán.
Una situación que, según fuentes consultadas de Mossos d'Esquadra, se debe a que Cataluña tiene un mayor tejido anarquista que otras zonas de España, la permisividad y que existen demasiadas zonas masificadas, lo que genera que existan pisos vacíos. Este cóctel provoca que las cifras se disparen respecto al resto del país.
Lo cierto es que Cataluña tiene un problema, ya que en el periodo entre 2015 y 2022, la okupación se ha disparado en la región un 77% -según un análisis del Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía aplicada- y aunque ahora las cifras remiten poco a poco, es un problema de difícil gestión. Es por este motivo que desde el Govern han intentado rebajar sus cifras agilizando el proceso de echar a los okupas conflictivos, aunque fuentes del cuerpo catalán no ven que esta vaya a tener un impacto directo sobre las cifras.
La comparativa inevitable es con Madrid, que ha sufrido en el primer trimestre de 2023 un total de 369 okupaciones, situándose en cuarta posición. Pese a ello, las okupaciones y allanamientos son casi cinco veces menos que en Cataluña. Mientras en la Comunidad de Madrid se han producido, de media, cuatro delitos de este tipo al día durante esta etapa del año, en Cataluña ha habido dieciocho. La capital representa, en este primer trimestre, el 9,4% de las okupaciones y allanamientos de toda España.
Desde el Instituto Coordenadas denuncian que no se ha cambiado el marco normativo pese al aumento progresivo de este tipo de delitos y lo catalogan de "pandemia en Europa". Según sus cifras, en España se ha pasado de 2.000 okupaciones anuales en España en el año 2010 a las 16.726 registradas el pasado 2022. Las cifras totales de España en 2010 son cercanas a las que registró solo Cataluña el primer trimestre de 2021 -1.966 okupaciones y allanamientos-.
Este mismo instituto denuncia, a través de su presidente Jesús Sánchez Lambás, que España "es el país más laxo entre las principales economías" y que los países de nuestro entorno "cuentan con mecanismos de defensas rápidos ante el asalto", tal y como corroboramos en Vozpópuli.
Una situación que se une a la que existe en Cataluña, donde los sindicatos de Mossos han denunciado en varias ocasiones una falta extrema de efectivos y cuya capital está liderada por una alcaldesa siempre bajo sospecha de ser permisiva con la okupación. Este diario ya publicó la denuncia de Valents, que acusaba a Colau de gastar 40.000 euros de dinero público en arreglar un local okupa.
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