El narco Marcial Dorado, conocido por aparecer en unas fotos sobre un yate junto al actual presidente de la Xunta de Galicia, no tendrá que regresar a prisión. Podrá seguir disfrutando del tercer grado que le otorgó Instituciones Penitenciarias -dependiente del Ministerio del Interior- después de un auto del Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, que rechaza el recurso que presentó la Fiscalía contra esta excarcelación.
El tercer grado que le concedió Prisiones en junio contempla dejar la cárcel y trasladarse al Centro de Inserción Social de Coruña. La Fiscalía se opuso alegando la gravedad de los delitos cometidos, que todavía le faltan casi seis años para cumplir su condena y que la decisión fue adoptada por una mayoría de la Junta de Tratamiento de cárcel de Teixeiro (La Coruña), pero no por unanimidad.
El juez José Luis Castro, en un auto al que ha tenido acceso este periódico, avala la decisión de Interior, aunque le afea que no incluyera en el tercer grado un plan específico de reinserción o de reparación para las víctimas de la droga. “Se echa de menos no haber fijado una actividad reparadora del daño que permita enfocar el tratamiento al principio de reinserción social, así como dar satisfacción moral a las personas que han sufrido daños como consecuencia del consumos de sustancias tóxicas”, dice el magistrado.
Marcial Dorado cumple una condena de 16 años y un día por delitos relacionados con el narcotráfico, concretamente delitos contra la salud pública y blanqueo de capitales. Terminará de cumplir su condena el 27 de mayo de 2025. La cárcel tuvo en cuenta que en dos meses cumple las tres cuartas partes de la condena, que ya ha disfrutado de permisos de salida ordinarios sin incidentes y su buena conducta en prisión.
"Es una persona correcta"
“Es una persona correcta que suele tratar al personal del centro de forma respetuosa al igual que a sus compañeros con los que no suele tener problema alguno de convivencia”, dice el informe de la Junta de Tratamiento. Durante los años que ha pasado en la cárcel Marcial Dorado no ha registrado sanciones y sí “20 recompensas por estar en un módulo de respeto desde su creación”. Los módulos de respeto son dependencias dentro de la cárcel donde se ubica a presos de confianza y gozan de cierta autogestión.
En ese módulo realizó actividades recreativas y deportivas, empezó con labores de Marquetería e integró también la Comisión de Higiene. Según el auto, el narco ha mostrado su disposición a colaborar con la Cruz Roja o con Cáritas y el juez ha ordenado que se incluya esta premisa en su informe de libertad condicional a la que accederá en el momento que cumpla las tres cuartas partes de su condena en octubre.
Este preso se dio a conocer después de que el diario El País publicase en 2013 unas fotos suyas con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, quien el mes pasado revalidó la Presidencia de la Xunta. Fueron tomadas en 1995 cuando el líder gallego desempeñaba un cargo público en el Servicio Gallego de Salud. Dorado fue condenado a seis años de cárcel por la Audiencia Nacional en 2015 por un delito de blanqueo de casi 22 millones procedentes del narcotráfico. Antes de eso ya tenía una condena de diez años de cárcel impuesta en en 2009 por su vinculación a una organización de narcotraficantes, a la que vendió un barco.
El dirigente popular negó que existiera una relación de amistad entre ambos. Enmarcó las fotos en un contexto de ocio en el que había más gente y defendió que en aquel momento, 1995, Dorado no había sido condenado por narcotráfico. En su última entrevista concedida a La Sexta, Marcial Dorado, dijo que él sí se consideraba amigo de Feijóo y afirmó que el ahora presidente llegó a dormir en su casa y su mujer le hacía el desayuno. Según declaró, dejaron de ser amigos entre el año 2000 y el 2001.
