El 'caso Negreira' pone el foco ahora en la actuación de los colegiados durante la etapa en la que el exdirigente arbitral recibió 7 millones de euros del Barça por presunto asesoramiento. El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, ha solicitado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que entregue circulares y comunicaciones de cualquier tipo para analizar cualquier vínculo con José María Enríquez Negreira.
El instructor accede de esta forma a lo solicitado en mayo por La Liga (personada como acusación particular)
para investigar si los árbitros de primera división adulteraron el resultado de los partidos en favor del club blaugrana y si lo hicieron siguiendo órdenes del entonces vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA).
En su escrito, al que ha tenido Vozpópuli, la defensa letrada de La Liga pidió que se aportara a la causa documentación en poder de la Federación de Fútbol. Entre dicho material destaca un cuestionario que el CTA realizó de forma individual para la plantilla de árbitros de la pasada temporada concerniente a las relaciones que pudieran tener con el hijo de Negreira, Javier Enríquez Romero.
El cuestionario del 'caso Negreira'
El cuestionario recogía un total de cuatro preguntas centradas en determinar si hubo vínculos con el hijo de Negreira, el cual confesó que elaboró informes para el Barça que se entregaron en hoteles y a dos o tres días del partido. Al respecto, se preguntó a los árbitros si habían tenido algún tipo de relación con Enríquez Romero antes de mayo de 2018 (año en que Negreira cortó relaciones con el club).
También si en ese periodo fueron acompañados por el hijo de Negreira al estadio donde iban a arbitrar. Si la respuesta era afirmativa, se pedía relacionar partidos y fechas. Del mismo modo también se inquirió, en caso de guardar alguna relación con el coach deportivo, se especificara de qué tipo y si hubo compensaciones económicas.
El cuestionario del CTA remitido a los árbitros se centraba en las relaciones con Negreira hijo hasta 2018, en si recibieron alguna compensación económica de él y si éste les acompañó a los campos donde iban a arbitrar partidos del Barça
La Liga pidió al juez que, dado que la Federación se había comprometido a colaborar con la Justicia, reclamara el resultado de dicho cuestionario. En segundo lugar, propuso también que se recabara todo tipo de comunicaciones de los árbitros que tuvieran que ver con Negreira padre e hijo. Por ello el juez acaba de solicitar correos electrónicos, cartas, mensajes de texto y de otro tipo intercambiados entre los árbitros profesionales sobre este asunto.
En tercer y último lugar propuso adherir el informe de la Real Federación Española de Fútbol remitido a la UEFA sobre todas las pesquisas internas desarrolladas hasta el momento. El juez ha atendido la solicitud y ha librado oficio al responsable de Integridad de la Federación, Miguel María García Caba, para que remita todo el material solicitado.
El ente que preside Javier Tebas recordó en su escrito de mayo la entrevista que concedió María Luisa Romero, exmujer de Enríquez Negreira, a Ok Diario, en la que dijo que vivió en primera persona cómo éste encargaba a su hijo que acompañara "a fulanito de tal y cual al hotel" y después se iba con él a comer.
Nuevo encargo a la Guardia Civil
Además, el magistrado ha aprovechado sus últimos pronunciamientos para oficiar a la Guardia Civil a que investigue si bajo la vicepresidencia de Negreira (1994-2018) los árbitros llevaron a cabo alguna conducta ilícita con el objetivo de progresar en su carrera profesional.
En concreto, pide investigar si se instauró en el seno del CTA "un sistema de calificación de los árbitros tutelado por el vicepresidente" que abría la puerta a árbitros afines a él a dirigir partidos relevantes de La Liga o Copa y partidos internacionales o incluso mantener la categoría aumentando así sus ingresos. No obstante, el juez avisa de que, aún cuando los investigadores no constaran posibles pagos de Negreira a los colegiados, habría que determinar si los abonos del Barça superiores a los 7 millones de euros constituyen, por sí mismos, delito.
Además, el juez da pistas de por dónde discurrirá la investigación al rebatir el criterio de los imputados de que no constan indicios de que Negreira comprara voluntades de los árbitros con parte de los fondos que percibió del Barça durante 18 años. "De lo que no existen indicios es del tradicional método de pago para un partido concreto", responde en uno de sus últimos autos.
El índice corruptor
El magistrado, que habla de una "corrupción sistémica en el arbitraje español", da especial relevancia a las declaraciones en prensa de varios árbitros retirados que indicaron que el CTA empleaba un índice corrector (que ellos llamaban en tono de burla 'índice corruptor') para determinar la categoría interna de cada árbitro. Al hilo dijeron que no atendía a criterios conocidos, por lo que sospechaban que había una discrepancia latente entre el nivel técnico real de cada árbitro y su clasificación dentro del Comité.
Por todo ello, el magistrado encarga a la Guardia Civil que averigüe este extremo y que siga adelante con las pesquisas. Además, ha ratificado la condición del Real Madrid como perjudicado de los hechos abriendo la puerta a que cualquier club pueda personarse como víctima. Del mismo modo ha expulsado a la RFEF de la causa y ha abierto una pieza separada para investigar un presunto blanqueo de Negreira padre e hijo.
