La noticia de la detención de Domingo S.S. cayó como un jarro de agua fría en la plantilla del Hospital Gregorio Marañón. Los detalles de la investigación de la Guardia Civil corrieron como la pólvora por los diferentes grupos que tienen los empleado que no salían de su asombro por las noticias publicadas. Varios de estos trabajadores han explicado a Vozpópuli que este médico era un "buen profesional, cercano y muy educado" en el trato tanto con los pacientes como con sus compañeros.
La noticia de la detención de este sanitario y su mujer fue comunicada el viernes 7 de abril en plena Semana Santa. "Nadie la conocía y nadie se la esperaba", relata uno de sus compañeros. "Al principio no sabíamos que se referían a Domingo hasta que un día después nos lo comentó otro trabajador. Siempre es educado, cordial y buen profesional por lo que dicen los pacientes", afirma este empleado.
"Simpático y didacta"
Desde que salió a la luz su identidad no ha cambiado en su forma de actuar y sigue cumpliendo su jornada laboral. "El día que su noticia salía en todas las televisiones estaba tomando un café con compañeros en la cafetería del hospital", relata otra enfermera que resalta el carácter tranquilo de este madrileño.
La fama de este sanitario dentro del Hospital Gregorio Marañón se debe a su responsabilidad con los residentes en Urgencias. Una pata importante ya que muchos jóvenes necesitan ser guiados en una de las unidades más difíciles dentro de los servicios del centro.
"A todos nos ha tratado siempre de forma normal. Muy simpático y también didacta, se nota que le gusta su trabajo", relata una de estas jóvenes. Mientras que los piropos y las buenas palabra salen de la boca de los trabajadores la cautela y el silencio es la nota predominante cuando son preguntados por la 'cara oculta' de Domingo.
El médico "no hablaba de su vida personal"
"Conocemos su labor profesional en su casa no sabemos qué hacía o que aficiones tenía o como pasaba el tiempo. Tampoco las relaciones familiares", zanja uno de los auxiliares. Este médico nunca tuvo una mala palabra con ninguno de los empleados del Gregorio Marañón.
Todo lo contrario muestra la investigación el Equipo Mujer-Menor (EMUME) del la Comandancia de Madrid, los servicios sociales, el fiscal de guardia y los agentes tutores de la Policía Local. Por ello, Domingo y su mujer Mercedes perdieron la patria potestad de los ocho menores presuntamente maltratados. No puede volver a su casa en Colmenar Viejo ya que tiene una orden de alejamiento sobre su mujer. Ella no denunció pero la Fiscalía y el juez acordaron esta medida cautelar. Mercedes sigue pernoctando en la denominada 'casa de los horrores'.
La figura de Domingo está rodeada de misteriosas circunstancias. Este sanitario notificó a las administraciones que había extraviado toda su vida académica en diferentes etapas temporales. Las instituciones que expidieron las mismas comunicaron estas pérdidas, un total de cinco, en el Boletín Oficial del Estado (BOE), tal como ha podido comprobar Vozpópuli.
Domingo, junto a su mujer Mercedes P.B, crearon el 20 de mayo de 2010 la empresa DOMER Medical S.L. que tiene como objetivo la explotación de clínicas dedicadas a la atención sanitaria y a la prestación de servicios de cirugía menor en todos los ámbitos de la salud del cuerpo humano. La sede social está ubicada en el chalet donde residían en Colmenar Viejo (Madrid), que fue registrado por los agentes de la Guardia Civil. Según los datos del registro mercantil, el 7 de octubre de 2014, se inscribió la extinción de la sociedad dejando de ser sujeto de derechos y obligaciones.
Más de una década en la 'casa de los horrores'
Aunque en un principio se había informado que este médico tenía 45 años su edad real es de 57. Se empadronaron en Colmenar Viejo en 2011 procedentes de Madrid. Mercedes es natural de la capital mientras que Domingo procedía de Salamanca, según informan a Vozpópuli fuentes de la investigación. De forma paralela a todas estas averiguaciones, la Guardia Civil sigue las pesquisas para determinar el origen y el destino del ingente material sanitario que fue localizado en la 'casa de los horrores'.
La 'casa de los horrores' de Colmenar Viejo estaba totalmente sucia, "insalubre", salvo por el despacho del médico. La habitación estaba impoluta. Los agentes localizaron una "ingente cantidad" de material sanitario. Había batas, trajes de quirófano, guantes, mascarillas, gasas y medicamentos en "cantidades industriales". El médico no pudo acreditar su procedencia. Por ello se le investiga también por un delito de hurto.
Se da la circunstancia de que días antes de su detención este médico buscaba un "transporte seguro y discreto" para realizar un porte. El padre reguntó a diferentes personas del hospital y contactó con empresas para ver cómo podía concretar estas maniobras.
Sanidad investiga el presunto robo de material
Por su parte, la Dirección General de Recursos Humanos y Relaciones Laborales de la Consejería de Sanidad va a abrir un expediente con designación de un instructor, que será un médico, por la supuesta sustracción de material sanitario, según han asegurado fuentes del Gobierno regional a Vozpópuli. Otras fuentes consultadas explican que este hombre también pudo haber inflado el precio de algunos elementos adquiridos por el centro por encima del valor del mercado.
Con toda esta polémica, el Hospital Gregorio Marañón colaborará activamente ante cualquier requerimiento judicial. Igualmente se encuentra a expensas del desarrollo de la instrucción del caso para adoptar las medidas oportunas en función de la legislación vigente. Hasta que no se conozca el devenir de las investigaciones, este profesional no podrá ser despedido del centro.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación