El Pleno del Senado tiene previsto aprobar este miércoles con el apoyo del Partido Popular y el Partido Socialista la designación de los cuatros nuevos miembros que en las próximas semanas pasarán a formar parte del Tribunal Constitucional. Los dos candidatos elegidos a propuesta del PP son Ricardo Enríquez -magistrado que actualmente forma parte del tribunal de garantías- y el catedrático Alfredo Montoya. Por su parte, el PSOE ha decidido colocar en el Alto Tribunal al ex fiscal general del Estado Cándido Conde-Pumpido y a la catedrática María Luisa Balaguer.
A continuación, se detalla cómo son los nuevos magistrados que ocuparán sillón en el guardián de la Constitución:
Alfredo Montoya: Catedrático de Derecho del Trabajo, doctor honoris causa por la Universidad de Murcia, la Universidad Rey Juan Carlos y Central del Este (República Dominicana), ha sido aupado al Tribunal Constitucional por su todavía presidente Francisco Pérez de los Cobos, con el que mantiene una estrecha amistad. Quienes lo conocen lo definen como un hombre con sentido de Estado y de ideas conservadoras. Según ha podido saber este periódico, Pérez de los Cobos sugirió al Gobierno que su presencia en el Alto Tribunal era "necesaria" para que ejerciese de contrapunto con el magistrado progresista Fernando Valdés, también catedrático de Derecho del Trabajo.
Ricardo Enríquez: Madrileño, juez de carrera. Ingresó en el Constitucional en el año 2014 aupado por el Partido Popular tras el fallecimiento del magistrado Francisco José Hernando. Previamente pasó 24 años en la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo donde fue ponente de más de 2.500 sentencias. El Gobierno le había prometido que la actual renovación se llevaría a cabo contando con su continuidad en el TC. Es un magistrado de marcado carácter conservador.
Cándido Conde Pumpido: Es el nombre más conocido entre los nuevos magistrados que ocuparán una plaza en el Constitucional. Ex fiscal general del Estado con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Conde Pumpido es actualmente el magistrado más antiguo de la Sala Segunda del Tribunal Supremo. Ha contado con el apoyo del exministro Alfredo Pérez Rubalcaba, para ser aupado al tribunal de garantías. Es, sin duda, uno de los pesos pesados de la Carrera Judicial ya que nadie en la Judicatura duda de su inteligencia y preparación jurídica.
María Luisa Balaguer: Es la única mujer que forma parte de este tercio de renovación del TC. Almeriense de nacimiento, es catedrática de Derecho Constitucional. PP y PSOE han visto con buenos ojos que con su elección se cubra parte de la cuota femenina en el Alto Tribunal, que se veía debilitada con la marcha de la vicepresidenta Adela Asúa. Está considerada una jurista "muy de izquierdas". Cuando el Ejecutivo de Mariano Rajoy decidió reformar de forma sorpresiva la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional (LOTC) ante el desafío soberanista catalán, esta catedrática fue muy crítica con dicha iniciativa. En declaraciones a Vozpópuli señaló que se trataba de "judicializar un problema político" de una forma "oportunista, rídicula y peligrosa".
