La OCU ha dado con el secreto para saber cuando estamos comprando pan congelado. El pan es uno de esos alimentos que no suele faltar en nuestro día a día. Cada vez que vamos al supermercado nos encontramos con una nueva variedad: blanco, integral, de centeno, de masa madre, multicereales, baguette, chapata, challah, brioche, sin levadura, bagel, de maíz, etc. Las opciones son infinitas y todas ellas deliciosas.
Al igual que ha ocurrido con otros muchos alimentos, este producto también ha sufrido el impacto de la inflación. A pesar de que no es por el que más pagamos, su precio ha subido un 5% con respecto a los meses del año anteriores. Sin embargo, esto no ha hecho que los españoles dejen de consumirlo, puesto que se trata de uno de esos indispensables que no faltan en la mesa de todas las casas a mediodía.
Una de las grandes dudas cuando vamos a Mercadona, Lidl o Carrefour siempre esta en qué tipo de pan no estamos llevando a casa. En la mayoría de las cadenas de supermercados optan por la producción de masa de este producto por lo que es mucho más fácil que estemos comprando una barra de pan congelada. ¿ Y cómo se si el pan que estoy comprando es artesanal o es congelado? Si todavía no sabes diferenciarlo, no te preocupes, la OCU tiene la respuesta.
La OCU explica el secreto para saber si el pan es congelado
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha dado algunos de los trucos que debemos tener en cuenta cuando vayamos al supermercado y decidamos comprar pan. Saber si estamos adquiriendo uno que es artesanal o congelado es todo un reto. Las opciones del mercado son muchas y, en algunas ocasiones, no nos solemos fijar mucho en el etiquetado. Esto hace que caigamos en la trampa y nos llevamos a casa un pan que no es artesano.
Para evitar esto, la OCU ha explicado que una de las primeras cosas que tenemos que hacer es fijarnos en el aspecto que tiene el pan. Es un indicador definitivo porque si vemos que todas las barras tienen una forma idéntica es muy probable que este pan sea industrial. Esto nos da a entender que se ha producido en masa por lo que será congelado. En el caso del artesanal, cada una de las piezas es diferente. Tiene imperfecciones y suele variar en la forma, un síntoma de autenticidad.
El olor también es muy importante para la OCU. El pan industrial suele tener un aroma "menos pronunciado" si se compara con el artesanal. Esto se suele comprobar cuando se tuesta el pan. Si lo hace y no te llega ese olor tan característico que tiene la levadura, sabrás que no se trata de un artesanal y que has comprado uno congelado.
Otra de las pistas que da la OCU es comparar el peso del pan. Si el producto no es congelado, tendrá un mayor peso. Esto se debe a que la miga es mucho más densa y esponjosa en comparación con el industrial tiende a ser mucho más ligera. También hay que tener en cuenta la corteza. La OCU dice que los panes que son industriales suelen tenerla más fina y delgada. En cambio, la del artesanal es más gruesa.
Comer pan artesanal tiene importantes beneficios en la salud de las personas:
- Aporta nutrientes. El artesano se hace con harinas naturales e integrales que son más beneficiosos para la saluda que lo que lleva el industrial.
- Sin aditivos ni conservantes. Al estar elaborado con unos ingredientes naturales, tiene menos aditivos que los industriales. Esto implica una reducción del consumo de sustancias artificiales.
- Fibra. Para hacer los panes artesanales se utilizan granos enteros y harinas que son de grano completo, por lo que aumenta su contenido de fibra perfecto para tener una digestión saludable.
- Un bajo índice glucémico. El artesano posee un índice glucémico más bajo por lo que aporta menos niveles de azúcar y ayuda a controlar el apetito.