España

La exdirectora de Empleo en Jaén detenida por Alaya se jacta de haber conseguido el cargo en una cafetería

Irene Sabalete, exalto cargo de la Junta de Andalucía arrestada en la 'Operación Barrado' y 'pillada' arengando a sus trabajadores para que hicieran campaña a favor del PSOE, confesó a la Guardia Civil cómo se repartían los cargos públicos entre los afiliados.

Irene Sabalete Ortega, la exalto cargo de la Junta que fue grabada amenazando con despedir a los funcionarios de su departamento si no hacían campaña en favor del PSOE, también fue locuaz con los guardias civiles que la detuvieron el pasado 24 de marzo acusada de malversación de caudales públicos y prevaricación dentro de la 'Operación Barrado', en la que también fueron arrestados otras 15 personas. La destacada militante del PSOE andaluz, cuyo perfil de Facebook contiene fotografías de ella con Susana Díaz y Pedro Sánchez entre otros dirigentes socialistas, reveló a los agentes que la interrogaban cómo había conseguido el cargo de directora provincial de Empleo en Jaén con 33 años. Su condición de militante del partido y un encuentro en la cafetería de un hotel de lujo de Sevilla con un consejero de la Junta fueron suficiente para que 24 horas después fuera nombrada para el alto cargo desde el que supuestamente cometió las irregularidades por las que ha sido arrestada. "Es habitual ofrecer los cargos públicos a los miembros del partido que estuvieran interesados", reconoció sin problemas.

Irene Sabalete consiguió el cargo sólo 24 horas después de reunirse en la cafetería del Hotel Alfonso XIII de Sevilla con el consejero Antonio Fernández, más tarde imputado en el 'caso de los ERE'

Detenida poco antes de las nueve de la mañana en la localidad jienense de Torre del Campo, de donde es natural y en la que comenzó su carrera política como concejal en 2007, Irene Sabalete aseguró tras leérsele por primera vez sus derechos que no deseaba prestar declaración. Sin embargo, cuando a las 14:40 de ese mismo día los miembros de la Unidad Central Operativa (UCO) comenzaron a tomarle declaración en la comandacia de Sevilla donde había sido conducida, la dirigente jienense del PSOE no tuvo reparos en contestar a todas las preguntas que le plantearon. La primera fue, precisamente, cuál era su "titulación académica", a lo que ella aseguró que era "licenciada en Ciencias Política y Sociología por la Universidad de Granada", para instantes después detallar "su trayectoría profesional y cargos públicos" que había ocupado.

Sabalete, que había ocupado el puesto número 9 del PSOE en las listas por Jaén en las elecciones autonómicas del pasado 22 de marzo, detalló que había sido concejal del PSOE en su localidad natal entre 2007 y 2009, año en que lo dejó  para hacerse cargo de la delegación provincial de Empleo de la Junta de Andalucía hasta 2012, el cargo desde el que supuestamente cometió las irregularidades con los fondos para la ofrmación. En este punto, la militante socialista fue especialmente locuaz y explicó que "entre las prácticas habituales del partido [PSOE]" se encontraba "ofrecer los cargos públicos a disposición del partido a los miembros que estuvieran interesados". Por eso, ella entregó "su currículum a Paco Reyes, por aquel entonces secretario provincial del PSOE en Jaén". Pocos días después recibía una llamada del en ese momento consejero de Empleo de la Junta, Antonio Fernández, uno de los principales imputados en el caso de los ERE, quien "la citó para mantener una reunión en Sevilla".

En la cafetería del Hotel Alfonso XIII

Dicho encuentro no tuvo lugar en un despacho oficial, sino "en una cafetería pública perteneciente al Hotel Alfonso XIII", uno de los más lujosos de la capital andaluza. "En este acto, el consejero de Empleo me ofreció ocupar el cargo de delegada provincial de Empleo en Jaen a lo que acepté, ya que según las palabras del consejero mi perfil profesional y personal se ajustaba a los que estaba buscando", aseguró a los agentes. El tiempo que transcurrió entre esta propuesta y su nombramiento fue muy corto, aseguró, ya que creía "recordar que [fue] un día o así", añadió. En septiembre de 2009 asumía el nuevo cargo. Como experiencia para justiciar dicho puesto, aseguró que antes de llegar al puesto trabjaó como "coordinadora provincial en una fundación pública, concretamente en la Fundación Andalucía Emprende", dependiente también de la Junta de Andalucía. En dicho puesto estuvo los dos años en los que fue concejal en su localidad natal.

Pese a que su trayectoria profesional se limitaba a puestos 'a dedo' de la Junta, no dudó en asegurar a la Guardia Civil que se consideraba capacitada para ser delegada provincial de Empleo

También aseguró que fue "asistente técnico durante año y medio aproximadamente del delegado provincial de Empleo y Desarrollo Tecnológico de Jaén, Juan de Dios Alcázar, quien le ofreció parte de su equipo porque se conocían del partido", admitió. Dieciocho meses en los que su trabajo se centró en "la preparación de notas de prensa, organización de actos públicos, sobre todo en temas relacionados con emprendedores". En ese momento, uno de los agentes de la Guardia Civil que la interrogaban le preguntó si con dicho bagaje provisional consideraba que "reunía las condiciones idónicas para ejercer el trabajo" a lo que ella respondió con un monosílabo: sí. El resto de su declaración versó sobre las supuestas irregularidades detectadas durante la investigación en la Delegación Provincial de Empleo de Jaén mientras ella fue su máxima responsable y que Irene Sabalete negó. En algunos momentos se escudó en el desconocimiento y, en otros, en la falta de personal para controlar las subvenciones que finalmente fueron presuntamente defraudas.

Cuando al día siguiente compareció ante la juez Mercedes Alaya para declarar, la exalto cargo fue mucho menos locuaz que ante la Guardia Civil. De hecho, se negó a declarar después de que la magistrada le detallara las supuestas irregularidades detectadas en su gestión al frente de la Delegación Provincial de Empleo de Jaén. Éstas iban desde la falta de control en la práctica totalidad de los 57 expedientes de concesión de subvenciones de ayudas para la formación que se habían analizado hasta graves carencias como falta de facturas, contratos y justificantes de gastos, pese a lo cual su departamento no había iniciado ningún expediente para la devolución de las cantidades entregadas. Alaya la puso en libertad provisional acusada de malversación de fondos públicos y prevaricación. 

"Ya en el colegio mE interesaba la política"

Cuando fue arrestada el pasado mes de marzo, Irene Sabalete era un ferviente usuaria de las redes sociales en las que, además de colgar fotos suyas con destacados dirigentes de su partido, presumía de de llevar militando desde los 16 años en las Juventudes Socialistas, de cuya Comisión Ejecutiva Provincial había formado parte en los últimos años. "Recuerdo que ya en el colegio me interesaban los temas políticos, aunque a veces ni entendía bien lo que todo eso significaba", se lee en su perfil de 'facebook'. Afiliada al PSOE desde 1997, dos años después ya se integró en la candidatura que el partido presentó en su pueblo natal.

Elegida finalmente en 2007, llegó a ocupar el puesto de concejal de Igualdad y Nuevas Tecnologías del consistorio. Su fulgurante carrera política la llevó dos años y medio después a ser elegida por la Junta de Andalucía como delegada Provincial de Empleo, desde cuyo puesto controlaba, entre otras, las subvenciones que se repartían para impartir cursos de formación a desempleados. Es, precisamente, por esta función por lo que fue arrestada. Un días después de su detención salía a la luz una grabación en la que Sabalate, cuando aún era alto cargo de la Junta en su provincia, pedía a sus subordinados que hicieran campaña electoral a favor del PSOE si querían conservar su puesto de trabajo. Tras conocerse su arresto y el contenido de dicho documento sonoro, Irene Sabalete renunciaba a su militancia en el partido.

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