Los investigados por el asesinato del hermano de Begoña Villacís han confesado que el detonante del crimen fue un conflicto interno entre los miembros de 'Skin Retiro', según han informado fuentes policiales a Vozpópuli. Dentro de esta agrupación se vivieron momentos de tensión entre Luis, el herido grave, y Kevin Pastor, el detenido por el homicidio. Borja Villacís también tuvo un encontronazo con otro de los amigos del presunto asesino por unos insultos a su novia. Ese fue el cóctel que originó el tiroteo en la carretera de Fuencarral.
El desarrollo que ha contado el entorno de los amigos de Borja Villacís es el siguiente. Luis y Kevin Pastor tuvieron hace días una pelea. El trasfondo fue la quema intencionada de un coche del veterano miembro neonazi.
La cita iba a ser en la Casa de Campo
Durante el transcurso de la misma el primero agredió al joven que posteriormente intentaría acabar con su vida. De forma paralela, el hermano de la ex dirigente de Ciudadanos también habría tenido una disputa con un amigo del detenido por unos comentarios vejatorios hacia su novia.
Tanto Luis como Kevin formaban parte del grupo 'Skin Retiro'. Sin embargo, la mayoría de esta agrupación neonazi apoyaba a Luis porque consideraban que Pastor era un individuo peligroso que se había extralimitado en sus acciones. "Está muy mal de la cabeza", relatan desde el entorno de los investigados.
Con la situación de tensión el martes habían acordado una cita para intentar reconducir la misma. En un primer momento acordaron ir a la Casa de Campo pero Kevin rechazó la oferta. El papel de Borja Villacís era atestiguar que Luis y Kevin solucionaran sus problemas para pegarse sin el uso de armas. Sin embargo, no se fiaban los unos de los otros y una muestra de ello es que ambos acudieron con un coche de alquiler. Por el momento se desconoce si el tercer coche empleado, un turismo azul formaba parte de los grupos o simplemente auxilió a Luis después de ser herido.
El plan para acabar con Luis
Sea como fuere, la parte de Kevin incumplió las normas establecidas y acudió con al menos tres armas de fuego. Planearon y coordinaron una emboscada mortal a Luis y Borja Villacís. El primero iba conduciendo y recibió el impacto de varios perdigones con una escopeta en la cabeza. Por fortuna, ha podido salvar la vida y llegó por su propio pie al hospital porque los impactos no traspasaron su cráneo.
Menos suerte y más virulento fue el ataque al hermano de Begoña Villacís. Los asaltantes dispararon cuando aún se encontraba en el coche. Sangrando consiguió salir del vehículo y arrastrarse a una cuneta. En ese punto fue rematado con varios disparos en la cabeza. Una ejecución en toda regla. A esta cita no acudió el amigo de Kevin con el que había mantenido disputas por el comentario hacia su pareja.
La virulencia del tiroteo se ve reflejada en que en la escena se hallaron más de una decena de casquillos de bala que se encontraron en el lugar. También llegaron a encañonar a los testigos que discurrían por la zona rural pero ninguno de los presentes resultó herido.
La Policía Nacional también ha podido localizar a algunos de los conductores que circulaban por la zona a la hora del suceso. Algunas de estas personas aceleraron su marcha al comprobar atónitos el asesinato que se estaba produciendo. No obstante, sí que se pusieron en contacto con las autoridades.
La huida de los detenidos por el asesinato de Borja Villacís
El siguiente punto donde fueron detectados Kevin, su madre y su amigo fue a unos siete minutos en coche. En ese lugar dejaron las armas en una caja y varios de los casquillos. Los dos detenidos abandonaron a pie el sitio mientras que María José continuó sola la marcha y fue en Plaza Elíptica, en una gasolinera cuando mintió a la Policía y dijo que había sido secuestrada.
Kevin y su amigo se trasladaron a esconder a un chalet okupado por otro colega en la zona de Yuncos (Toledo). Fueron vistos por la Guardia Civil, ya que es su demarcación, y se lo comunicaron a la Policía Nacional.
Este miércoles a las 14:30 horas fueron finalmente detenidos por los GEO de la Policía Nacional. Todas las detenciones de este brutal asesinato se produjeron en apenas 26 horas de intenso trabajo policial. Está previsto que a lo largo de este jueves presten declaración ante los agentes que llevan el caso: el Grupo V de Homicidios. Su testimonio será clave para corroborar la historia que se ha relatado por parte del círculo de Borja Villacís.