El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha asegurado este lunes que está dispuesto a que su partido entre a formar parte del gobierno catalán si se concreta "una fecha y una pregunta" para la consulta soberanista. "Queremos una fecha que no se alargue demasiado y una pregunta concreta y clara", ha sentenciado en un almuerzo-coloquio organizado por la Cámara de Comercio de Barcelona ante unos 200 empresarios catalanes.
El líder republicano ha rechazado unas elecciones anticipadas porque el objetivo de ERC no es "maximizar" su número de diputados, pero ha advertido de que romperá el acuerdo de gobernabilidad con CiU si se dilata o anula la celebración de la consulta.
Junqueras ha mantenido la incógnita sobre si apoyará los Presupuestos catalanes de 2013 que aún debe presentar el gobierno de la Generalitat de Cataluña, y ha argumentado que el papel de ERC no es tanto votar las cuentas, sino "explicar la verdad" a la gente sobre la situación de Cataluña.
Esta verdad pasa, según el presidente de ERC, por proclamar que una Cataluña dentro del Estado no es viable económicamente por la situación, en su opinión, de expolio fiscal, y ha lamentado que el Govern caiga en el "chantaje" del Estado al celebrar una posible relajación del objetivo de déficit para este año. "Hacemos una fiesta cuando nos dicen que revisarán el déficit", ha lamentado Junqueras sobre la actitud del Ejecutivo catalán, ya que ha considerado que de esta forma legitima la actitud del Gobierno con Cataluña que los republicanos consideran que es hostil.
La estrategia de Junqueras pasa por exigir que las cuentas estén acompañadas por un relato de que, para Cataluña, la pertenencia al Estado español es un lastre: "Es una agonía que nos condena al chantaje infinito, al empobrecimiento de la economía y al debilitamiento de los consensos sociales".
"Dosis de inestabilidad"
Junqueras ha defendido ante los empresarios que son mejores las "incertidumbres" que presenta la apuesta independentista que hace su partido, que la agonía que, según ha defendido, supone para Cataluña seguir formando parte del Estado.
Ha argumentado que, en un contexto de crisis política y económica, para Cataluña serán mejores "ciertas dosis de inestabilidad" que mantener el statu quo, es decir, seguir siendo una comunidad autónoma de España.
Ha pedido a los empresarios que contribuyan a generar los grandes consensos económicos, políticos, culturales y sociales que necesita Cataluña para ver el futuro con optimismo y que pasan, a su juicio, por el soberanismo: "Guardaros los apriorismos ideológicos en el bolsillo", les ha pedido.
Fuera de la UE
Junqueras ha insinuado que, si la crisis de Chipre se cierra en falso, podría instalarse en el futuro el debate sobre la conveniencia de que una Cataluña independiente formara parte de la UE y del euro o que, por el contrario, quedara al margen de unión y la moneda única.
El líder republicano ha considerado que Europa se está comportando de tal forma con Chipre que cosas que ahora "nadie se atreve a decir" podrían ponerse encima de la mesa, y ha recordado que un Estado fuera de la UE tendría la posibilidad de devaluar la moneda como instrumento para salir de la crisis.
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