Fernando Savater contó hace poco, en el acto de la Fundación Neos en el que reapareció Alejo Vidal-Quadras, que los organizadores del Festival de Cine de San Sebastián impidieron a la actriz Leonor Watling, presentadora de aquella edición, expresar unas palabras de solidaridad con la familia del guardia civil asesinado por ETA pocos días antes. "Ni se te ocurra", le dijeron los mismos que hoy se solidarizan con Itziar Ituño, la actriz que apoyó la manifestación a favor de estos terroristas. Es una buena muestra de una ley del silencio que muchos se empeñan en seguir imponiendo en las calles del País Vasco.
Como bien apunta el filósofo, hay mucho de "paletada" en esa obsesión de algunos por reivindicar su "pueblo", su cacho de tierra. La asociación ultranacionalista vasca Naziogintza ha sido denunciada por la organización 'Hablamos español' por presuntos "delitos de amenazas, coacciones y odio" contra el abogado que consiguió tumbar el requisito del euskera para formar parte de la Policía Local de San Sebastián.
La acusación de Hablamos español se basa en un tuit de la organización nazionalista, donde apuntó lo siguiente: "Es hora de nombrar a los enemigos del euskera: el abogado Ignacio López Lera está detrás de numerosos recursos contra el euskera. También detrás de la última sentencia de la Audiencia de Donostia. Hacer una lista de euskarófobos no sería mala idea".
López Lera ha recibido el apoyo público del Ilustre Colegio de la Abogacía de Guipúzcoa tras la persecución sufrida. "Este colegio no puede permanecer silente frente a una campaña desarrollada con amplia repercusión en las redes sociales destinada a poner en la diana a quienes han ejercido la abogacía cumpliendo con sus deberes deontológicos y en atención leal a los derechos e intereses de sus clientes", reza el comunicado.
Fuentes de Hablamos español explican en declaraciones a Vozpópuli que antes de interponer la demanda contra Naziogintza consultaron con el propio López Lera. "Estamos interesados en que todas las personas que arriman el hombro para que en España se pueda hablar español lo puedan hacer con seguridad y tranquilas. En este acaso, pretenden señalar e intimidar al abogado para que desista de sus funciones. Esto no puede ser, queremos que los profesionales de la justicia estén protegidos", afirman.
López Lera ganó su primer caso en Irún, donde su cliente fue admitido en la plaza de policía local pese a no poder acreditar un nivel de euskera. Desde entonces, sus victorias en los tribunales han servido para molestar a organizaciones como Naziogintza.
Admiradores del fundador de ETA
En su página web, que solo puede leerse en euskera o en inglés, se reivindican como "grupo independentista que sitúa el euskera y la cultura vasca en el centro de su actividad. Creemos que el euskera es el eje vertebrador de nuestra Nación. Por eso, para ser coherentes, le damos al euskera la importancia que se merece. Nuestra Nación es el Pueblo del Euskera". "En consecuencia, vemos el universo que nos rodea a través y desde el euskera, y para aquellos lugares a los que no podemos llegar a través del euskera, utilizamos el inglés como lengua de comunicación internacional", añaden.
En uno de sus posts cargan contra la celebración del Día de la Constitución, y subrayan que en País Vasco no hay nada que celebrar porque los "vascos no somos españoles". "No hay esclavos que celebren el día de su esclavitud, como no hay prisioneros que celebren el día de su encarcelamiento. La Constitución española es una jaula para los vascos, el marco legal y político que niega nuestros derechos nacionales", aseveran.
También alaban al "gran intelectual vasco" José Luis Alvarez Enparantza, “Txillardegi”, uno de los fundadores de ETA y de Herri Batasuna: "El propio inconformismo de Txillardegi le llevaría a criticar el comportamiento político actual de los dos principales partidos nacionalistas vascos, el PNV y EH BILDU, por sus alianzas con los partidos políticos españoles".
Entre las ideas de este grupo se encuentra la afirmación de que "No hay naciones bilingües... Porque todas las naciones tienen su propia lengua materna. España y Francia nos obligan a los vascoparlantes a ser bilingües, para que los monolingües franceses y españoles que viven en la UE puedan vivir cómodamente aquí. No seamos ingenuos".
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación