Cuando en 2013 el equipo Euskaltel-Euskadi desapareció, miles de aficionados vascos al ciclismo no podían ni querían creerlo porque se quedaban huérfanos. Ahora, siete años después, el conjunto más idolatrado en el País Vasco vuelve a la carretera gracias al cambio de rumbo de la empresa que le da nombre. Euskaltel vira su estrategia con el regreso de su equipo y con un "ambicioso plan" de expansión por toda España que se presentará en las próximas semanas.
La vuelta del equipo de ciclismo, presentada esta misma semana merced a un acuerdo entre la teleco y la Fundación Ciclista Euskadi, es quizás la metáfora perfecta para explicar que en Euskaltel soplan vientos de cambio después de que el fondo inglés Zegona se hiciera con el poder en la compañía. Cambios estratégicos pero no tan dramáticos como se esperaban.
No es un secreto que la empresa busca reforzar su arraigo vasco con su apuesta por el deporte de las dos ruedas justo cuando más crecían los temores de su posible espantada. De hecho, el Gobierno vasco invertirá en los próximos meses para comprar un paquete accionarial que asegure dicho arraigo y espante los miedos de la plantilla y de los partidos.
Contra los temores..."unir país"
Ese miedo se había disparado en la segunda mitad del año pasado, cuando Zegona ordenó los primeros cambios relevantes en Euskaltel: la llegada del nuevo CEO, José Miguel García, el despido de 20 directivos y la venta de la red de telecomunicaciones. Dichos cambios desataron los nervios en el País Vasco. Y la propia empresa se encargó de disiparlos al colocar como presidente al número dos de Kutxabank.
Ahora, con la puesta en marcha del equipo de ciclismo para cuatro años se lanza un mensaje de tranquilidad a los inversores y políticos de la comunidad. El presidente de la empresa, Xabier Iturbe, declaró al presentar el proyecto que la vuelta del Euskaltel a la carretera era necesaria porque "la anterior etapa fue un éxito que dejó recuerdos inolvidables y sirvió para unir un país".
"Nos volcaremos"
Pero el negocio de Euskaltel, que en 2019 ganó 62 millones de euros según los resultados presentados esta semana, no está en el ciclismo, sino en su inminente intento de expansión nacional. La compañía con sede en el País Vasco utilizará la red de Orange -alquilada- para intentar crecer por toda España a través de la marca Virgin.
Tal y como estaba previsto, a principios de febrero la teleco vasca firmó un acuerdo con la magna operadora británica Virgin. De manera que la marca inglesa coexistirá con las tres marcas establecidas del Grupo (Euskaltel, la asturiana Telecable y gallega R), que seguirán prestando servicios en sus respectivas comunidades.
Poco o nada se sabe del plan de expansión territorial que ultima Euskaltel. Las fuentes consultadas solo aseguran que se trata de un intento "ambicioso" porque "nos vamos a volcar" para conseguir nuevos clientes por toda España. Como adelantó este diario, el proyecto de Euskaltel para expandirse bajo el paraguas de Virgin provoca nerviosismo entre sus competidores del sector. En poco tiempo se conocerán sus ofertas.
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