La carpeta catalana es prioritaria para el Gobierno y también para el Partido Socialista porque se abrirá sin contemplaciones en el arranque del nuevo curso político. En ello coinciden ambas partes, pendientes de retomar el diálogo que sobre ésta espinosa cuestión de Estado han mantenido con regularidad Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba. Pedro Sánchez, sustituto en la secretaría general a partir del próximo domingo, está dispuesto a abordar a fondo con el presidente el reto soberanista y sus posibles soluciones, pero primero quiere que Rajoy le despeje el calendario electoral para poder establecer unas reglas de juego sin sorpresas. “Queremos juego limpio”, resume un miembro del equipo de Sánchez.
Pedro Sánchez está dispuesto a abordar en profundidad con Mariano Rajoy el desafío soberanista catalán
La dirección saliente del PSOE, con Rubalcaba a la cabeza, sigue teniendo las cosas claras: Rajoy agotará la legislatura. Sin embargo, los resultados de las elecciones europeas del pasado 25 de mayo, la posterior abdicación del rey Juan Carlos y el vacío de poder abierto en el Partido Socialista tras el anuncio de retirada de Rubalcaba, han cambiado en poco tiempo muchas piezas del tablero, hasta el punto de que en el Gobierno y en la dirección del PP la hoja de predicciones no está tan nítida como hace seis meses.
Algunos barones del PP, los que se sienten más fortalecidos por su gestión municipal o autonómica, no quieren que se mezclen las elecciones generales con las de mayo del año que viene. Sin embargo, otros que se sienten en la cuerda floja, sí ven bien sumar ambas convocatorias para conseguir una movilización más potente del partido. Además, la tentación de Rajoy de aprovechar la inestabilidad interna del PSOE para adelantar las legislativas y no dar tiempo a que coja vuelo el liderazgo de Pedro Sánchez, puede ser grande, según afirman algunos miembros del Gobierno. En este almanaque, Rajoy también deberá tener en cuenta la evolución del desafío secesionista en Cataluña y, sobre todo, las encuestas. Es aquí donde los análisis de Pedro Arriola pueden resultar decisivos para el calendario electoral, pues sería ilógico poner en riesgo la mayoría absoluta que Rajoy tiene garantizada hasta finales del año que viene si lo que se anticipa para la próxima legislatura es un totum revolutum muy complejo de gestionar en el Parlamento.
Conocer el calendario electoral que maneja Rajoy es básico para el nuevo secretario general del PSOE no solo para saber si los tiempos de los posibles pactos de Estado juegan a su favor, sino también en clave interna de partido. Pedro Sánchez ha descartado convocar primarias en noviembre para la elección del cartel electoral, pero mantiene su compromiso de hacerlas abiertas a la militancia antes de que el Gobierno convoque las próximas legislativas. En su equipo hay quien opina que estas primarias no llegarán a celebrarse si el PSOE recupera en mayo plazas importantes como las de Madrid o Valencia, pues Sánchez aparecería entonces como un líder natural, pero éste es un escenario que se daría la vuelta como un calcetín en caso de que los socialistas se pegaran un nuevo tortazo y se vieran condenados a mantener el exiguo poder territorial que ahora retienen.
La presidenta andaluza también considera imprescindible conocer el calendario electoral que maneja Rajoy
El guión electoral de Rajoy es trascendental también para la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, pendiente de consolidar su autoridad en esta comunidad pasando por el examen previo de unas elecciones autonómicas, zancada a la que condiciona también su salto a la política nacional.
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