Una plaga de langostas está arrasando los cultivos y la ganadería de varias zonas de Extremadura, lo que está afectando a los trabajadores del campo. En la comarca de La Serena, en Badajoz, se está produciendo la mayor plaga jamás vista, según relatan los vecinos.
Estos animales en esta época viven su etapa solitaria, en la que salen a comer todo lo que pueden. La langosta marroquí, como se conoce, es un animal que se caracteriza por devorar toda clase de plantas, lo que destroza los cultivos e impide que los animales se alimenten del pasto si estas se reproducen en cantidades no asumibles por las aves de la zona.
El problema es que en La Serena, muchas fincas practican el cultivo ecológico, por lo que sobre estos campos no se puede echar ningún tipo de producto fitosanitario, la única herramienta que la Junta de Extremadura emplea para controlar estas plagas. ¿La consecuencia? Que estos cultivos están desprotegidos y que las langostas que se reproducen en estas fincas se trasladan por toda la comarca, afectando a otras fincas a priori protegidas.
Pese a que la Junta de Extremadura cuenta con un plan de prevención contra estos animales, los habitantes de la comarca están muy molestos porque estas situaciones no solo siguen ocurriendo, sino que van a peor. "No nos hacen ningún caso", cuenta a Vozpópuli un ganadero local.
Este ganadero cuenta que el año pasado, la Junta de Extremadura no aplicó ningún tipo de producto fitosanitario en La Serena. Este año sí lo han hecho, lo que no ha impedido que estos animales arrasen con todo a su paso, lo que le hace dudar de la efectividad del producto escogido por los técnicos de la administración a la hora de controlar esta plaga.
El protocolo de la Junta de Extremadura comienza con una prospección para analizar la situación, algo que sí se ha hecho en diversos puntos, según diversas fuentes de la comarca. Un análisis que llega tarde, ya que mientras tanto, las langostas asolan sin remedio las tierras. Vecinos de La Serena señalan que esta es "la mayor plaga de langostas que se ha visto en años".
La zona de La Serena es una de las pocas áreas de España donde las langostas viven todo el año. Son animales necesarios para que las aves de la zona se alimenten, al tratarse de una zona ZEPA (Zonas de Especial Protección para las Aves). El problema es que el número de estos animales es excesivo desde hace ya tiempo, lo cual produce también problemas de seguridad vial. Habitantes de la zona, especialmente motoristas, se han quejado de un gran número de estos animales en las carreteras cercanas a Cabeza del Buey.
"Esto es lo que pasa cuando los que están dedicados a controlar estas plagas no hacen su trabajo o no tienen medios", señala otro afectado en Facebook, que afirma que "está todo arrasado y el trabajo, perdido". La consternación en La Serena es máxima y se sienten desatendidos por la Junta de Extremadura.
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