Pese a que Podemos está en estos momentos sintonizado con su lideresa en Moncloa, Yolanda Díaz, tras los roces en la coalición, el partido vive una guerra de baja intensidad con ella. Muestra de ello es que los morados mantengan el Consejo de Ciudadano Estatal que celebrarán este sábado, apenas unas horas horas después de que la 'dama roja' presente en público 'Sumar', su proceso "de escucha". Las fuentes consultadas entre los de Ione Belarra no dudan en señalar que la secretaria general marcará línea social al Gobierno y, de paso, atará a Yolanda Díaz al círculo morado para incidir en la línea de autorreivindicación del partido que gira en torno al 'somos imprescindibles'.
La dureza de Yolanda Díaz con la ministra de Defensa, Margarita Robles, no parece señal suficiente en algunos sectores morados de que el estreno de 'Sumar' sea un foco de reivindicación política. Más bien consideran que Díaz volverá a poner su cara 'amable' para conectar con la sociedad. No se esperan grandes soflamas ni discursos airados e hiperventilados sobre lo que debe hacer su espacio político en el Gobierno. Por todo ello, Podemos se encargará el sábado de ejercer ese papel.
Fuentes oficiales moradas insisten a este diario en que la fecha del cónclave estaba elegida mucho antes de que de Díaz optara por el 8 de julio para empezar a escuchar. No obstante, el partido podía haber pospuesto la cita. Podemos no ha movido ficha tras el batacazo electoral del primer frente amplio en Andalucía. El partido permanece en un calculado silencio que romperá Belarra este sábado.
Líderes no, partidos sí
Yolanda Díaz no estará arropada por los principales líderes de los partidos que conforman el espacio morado. Como adelantó este diario, la jefa morada en Moncloa llamó personalmente a los principales dirigentes de Unidas Podemos -Ione Belarra, Alberto Garzón, Ada Colau- y de la dupla Más País y Más Madrid -Íñigo Errejón y Mónica García- y les transmitió que prefiere tenerlos lejos en el estreno de 'Sumar'.
Eso sí, Díaz les pidió que la militancia y todos los concejales y el cargos medios hagan piña con ella en Matadero, escenario de la puesta en largo de sus planes. Tampoco habrá ministros morados en el acto, como reconoció este miércoles la propia Ione Belarra. Todos los rostros destacados de la izquierda entienden la decisión de Yolanda Díaz, a la que dan todo el espacio para dirigir sus tiempos.
Yolanda Díaz quiere alejarse al máximo de todo lo que huela a siglas de partido, especialmente tras el fiasco andaluz, que se saldó con una pelea entre Izquierda Unida, Más País y Podemos por las posiciones en las listas y por el candidato. Todo ello dejó formalmente a Podemos fuera del registro por un 'error' del que Podemos no se fía, ya que ve la mano de Izquierda Unida y de Más País para intentar dejarles fuera. Aquel 'lío' puso en alerta a la 'dama roja', que se convenció de la necesidad de no presentarse en sociedad con marcas desgastadas.
La expectación
Aunque el viernes no habrá rostros principales de la izquierda junto a la vicepresidenta segunda, varios diputados de Podemos y Más Madrid en la Asamblea regional, sin ir más lejos, confirman a este diario su asistencia en Matadero. El estreno de 'Sumar', una marca que también nació con polémica por una supuesta filtración del 'errejonismo' genera expectación en la izquierda española.
Yolanda Díaz quiere dar mucha más preponderancia a la sociedad civil. Ella busca reunirse con expertos, con las personas que saben qué necesita el país en educación, ciencia, sanidad, cultura, innovación... y será de ellos de donde beba para proponer. Pero la lideresa morada en Moncloa no carbura. Las fuentes consultadas en el espacio admiten que están ilusionados, pero reconocen que el 'efecto Díaz' ha perdido intensidad.
Eso sí la titular de Trabajo ya tiene una herramienta jurídica para alquilar espacios y organizar recursos al margen de los partidos. Y es que 'Sumar' ya ha comenzado un proceso de recaudación para que los simpatizantes de la vicepresidenta contribuyan económicamente. Es probable que 'Sumar' se acabe imponiendo y terminen siendo las siglas de una futura papeleta electoral. Pero eso el tiempo lo dirá.
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