Un total de 60 agentes de la Policía Nacional y 34 de la Guardia Civil han dado positivo por el virus Covid-19 en lo que va de crisis sanitaria, según informan a Vozpópuli fuentes oficiales de ambos cuerpos, en los que se ha puesto en marcha un sistema para llevar un conteo diario de los nuevos casos.
Tanto en la Policía Nacional como en el Instituto Armado se establecieron unas pautas de actuación tras la declaración del estado de alarma que incluían la obligación para las distintas plantillas de rellenar un formulario en el que se diese cuenta de los casos nuevos de contagio. Esa información se hace de forma diaria y acaba en las Direcciones Generales.
Estas medidas de control sirven también a modo preventivo para evitar que la enfermedad se propague. El formulario de la Policía pide indicar la plantilla, los casos pendientes de resultado, los casos negativos, los casos positivos, el personal de baja, y el personal recuperado.
En las indicaciones que se les impartió para casos de contagio de algún compañero, los agentes que hubieran estado en contacto con él “habrán de acudir a alguno de los teléfonos de emergencias para la valoración por un facultativo sanitario”. Por su parte, el funcionario que presente síntomas deberá ser aislado y dar parte a las autoridades.
Servicios esenciales
La orden del Ministerio del Interior en la que se detallaba las pautas de actuación para las fuerzas de seguridad durante el Estado de alarma ya fijaba una serie de servicios esenciales que siempre deben contar con personal suficientes. Avanzaba además la posibilidad de mover a agentes de otras unidad a fin de garantizar esos servicios esenciales.
Al menos la Policía Nacional ha establecido como servicios esenciales los servicios de 24 y atención al ciudadano, los servicios de custodia de detenidos, puestos fronterizos, el GEO y los Tedax. “En caso de registrarse un importante número de afectados en determinadas plantillas o unidades, que origine un desequilibrio en la distribución de los recursos humanos deberá ser atendido a nivel de cada Jefatura Superior. Los servicios esenciales deberán cubrirse con el personal necesario”, dice el plan de actuación elaborado por la Policía.
Este miércoles, la Guardia Civil ha lamentado la muerte de uno de sus agentes, de 39 años de edad y destinado en el servicio de retribuciones en Valdemoro. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha lamentado “profundamente” el suceso. “Dedicó su vida a servir al ciudadano. Descanse en paz", ha señalado.