Se llama de forma coloquial como "sales de baño" y es habitual su consumo en los clubes de alterne. Su nombre original es el '4-CMC', una novedosa droga de diseño que ya se encuentra en el foco de la Policía Nacional. Ya ha sido intervenida por primera vez en España esta sustancia estupefaciente. Una mujer búlgara era la encargada de distribuirla en nuestro país, según ha explicado a Vozpópuli el jefe del Grupo de Respuesta Especial del Crimen Organizado (GRECO) de la Policía Nacional, Emilio Rodríguez Ramos.
Esta droga, que se consume fumada, aumenta la concentración neuronal de la dopamina. Su origen es una variante natural de la planta del 'khat', conocida como la 'cocaína africana'. Esta sustancia es muy común en toda la zona del Cuerno de África, asegura el jefe del GRECO. Sin embargo, ya se está cultivando en otros países como Paquistán y Afganistán y también ha ampliado su radio a China.
Tiene unos efectos similares al éxtasis y a otros estimulantes. Aumenta el estado de ánimo y la sociabilidad. También ocasiona alucinaciones, taquicardias, agitación y movimientos espasmódicos. Todo ello puede desembocar en fallos cardiacos y psicosis.
De moda en los prostíbulos
"Está muy relacionada con el tema de los prostíbulos. Muy de moda dentro de estos clubes por sus efectos relacionados con las prácticas sexuales", destaca Emilio Rodríguez Ramos. En España, los agentes de su unidad junto a compañeros de la Comisaría de Burgos y de la sección de drogas sintéticas han conseguido por primera vez incautarla en una operación conjunta con la DEA americana y con la Policía de los Países Bajos.
Ha sido tal la rapidez de la Policía Nacional en desarrollar este operativo que la Fiscalía aún no tiene entre su lista de sustancias ilegales el 4-CMC. "En menos de un mes ya se incluirá", adelanta el jefe del GRECO. La operación que han llevado a cabo se denomina 'Carretas' por el negocio que tenía la principal investigada en Burgos.
Las pesquisas policiales arrancaron en el pasado mes de febrero cuando detectaron los movimientos sospechosos de la principal líder del grupo criminal que vivía en Burgos. Esta mujer, de nacionalidad, búlgara, controlaba una importante cantidad de sustancia estupefaciente en un almacén de Róterdam (Países Bajos). Sus contactos con relevantes jefes de la droga de este país hicieron imprescindible desarrollar el operativo policial. Todo ello con el objetivo de evitar que ampliara su red delictiva por otros puntos de España.
El 'fichaje' del transportista
El objetivo de esta 'madame' era traer la droga a nuestro país y distribuirla por toda la península. Los agentes comprobaron que, a través de sus contactos cercanos, estaba tratando de contratar a un transportista para que recogiera y acercara a nuestras fronteras la mercancía que tenía en oculta en ese almacén. En los Países Bajos, el 4-CMC se encuentra en la lista de drogas ilegales.
Cuando esta mujer alcanzó un acuerdo con otra persona para realizar este trabajo le comunicó que tenía que prolongar su viaje. Y es que había llegado a otro acto para que se desplazara a Ámsterdam para recoger otra mercancía de esta sustancia.
Días más tarde, el transportista se trasladó hasta el domicilio acordado de Ámsterdam para recoger el encargo. Tras una hora de espera, llegó un vehículo cuyo piloto hizo entrega al transportista español de una caja que contenía alrededor de 20 kilogramos de esta sustancia.
240 kilos en Países Bajos
Esa misma semana, los agentes comprobaron que el camión con la mercancía ilícita se dirigía hasta el punto establecido con la mujer residente en Burgos. En el momento en que el camionero trataba de entregarle la caja, el dispositivo policial establecido procedió a realizar las detenciones pertinentes. En total se arrestaron a tres personas, entre ellas a la jefa búlgara.
De forma simultánea, la Policía neerlandesa realizó un registro de la nave donde se encontraba almacenada la mercancía, interviniendo 77 barriles de 15 kilogramos cada uno que pertenecían a tres envíos diferentes relacionados con la causa investigada.
En total fueron 240 kilos de 4-CMC y los agentes de Países Bajos detuvieron, además, al presunto jefe de la mujer investigada. Para las autoridades neerlandesas, este detenido es una figura clave del narcotráfico en su país. En ese país las investigaciones aún continúan abiertas ya que faltan por arrestar a más colaboradores de esta organización criminal.
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