El ya exministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana José Luis Ábalos ha revelado que fue este sábado, el día en que el presidente Pedro Sánchez anunció su gran remodelación del Gobierno, cuando supo que sería finalmente cesado y ha asegurado que tiene previsto conservar "de momento" su escaño en el Congreso.
Así lo ha comentado en una charla informal que ha mantenido con periodistas tras el traspaso de la cartera del Ministerio a su nueva responsable, Raquel Sánchez, un acto al que han acudido los exministros socialistas José Blanco y Salvador Illa pero ningún miembro del anterior Consejo de Ministros ni del actual.
Ábalos ha confesado que hace tiempo trasladó a Sánchez, al que no ha citado en ningún momento de su discurso de despedida, que quería algo "más tranquilo", deslizando su disposición, llegado el caso, de abandonar la primera línea política. No obstante, ha recalcado que fue este mismo sábado cuando el presidente le confirmó la decisión "final" y cuando decidió comenzar la 'mudanza'.
Ahora, fuera ya del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que ha regentado durante más de tres años, Ábalos tiene la posibilidad de refugiarse en su escaño en el Congreso y es lo que de "de momento" tiene previsto hacer.
Futuro incierto
Lo que parece menos probable, según ha dado a entender, es si continuará al frente de la Secretaría de Organización del PSOE. Él ha comentado que esta misma semana se conocería la decisión final pero ha insistido en que necesita "una vida más tranquila".
Ábalos, cabeza de lista del PSOE por Valencia en las últimas elecciones generales, y la ex vicepresidenta primera Carmen Calvo, 'número dos' del partido por Madrid, son los dos únicos ministros salientes que mantienen su escaño en la Cámara Baja.
Con su decisión de conservar "de momento" su sillón en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo, Ábalos podría ser premiado por el Grupo Socialista en el Congreso con una presidencia de comisión, como ha ocurrido con otros exministros.
Al inicio de la legislatura, Ábalos y Calvo, junto con la titular de Hacienda, María Jesús Montero, y el propio presidente del Gobierno, conservaron su escaño en el Congreso, al contrario de lo que ocurrió con el resto de integrantes y secretario de Estado del PSOE, que abandonaron su sillón conforme a las directrices de Ferraz y Moncloa.
Escaños en el aire
En el caso de Unidas Podemos, en cambio, la decisión que se adoptó en este sentido es que todos sus miembros del Gobierno mantuvieran el escaño del Congreso, salvo Pablo Iglesias, que dimitió el pasado mes de marzo para competir en las elecciones autonómicas de Madrid.
En tanto que diputados, Calvo y Ábalos --y con ellos también Sánchez y Montero--, han compaginado su sueldo como miembros del Gobierno con la indemnización mensual a la que tienen derecho sus señorías para cubrir los gastos "indispensables para el cumplimiento de su función" parlamentaria.
Una ayuda cuya cuantía es de 935,37 euros al mes para el caso de los diputados elegidos por Madrid y de 1.959,62 euros para los del resto de circunscripciones. Así, mientras Calvo --diputada por Madrid-- percibía al año 13.095,18 euros del Congreso, Ábalos --parlamentario por Valencia-- percibía, además de su sueldo de Moncloa, una cuantía de 27.434,68 euros anuales.