Cada vez son más los políticos que sucumben a Instagram. Con más de mil millones de usuarios a nivel mundial, esta red social se ha convertido en un caldo de cultivo del populismo. No importa el país ni el signo político, lo que importa es establecer un canal de comunicación directo y fluido con posibles votantes más allá de los mensajes institucionales que puedan lanzarse a través de otras herramientas. Distanciarse de la política tradicional y del establishment tiene premio. Y Santiago Abascal lo sabe.
Pese a que Vox, el partido que lidera, aún no dispone de escaños en el Congreso de los Diputados, Abascal ya ha conseguido 121.000 seguidores en Instagram, más que los dirigentes de los partidos tradicionales. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuenta con 92.200, mientras que el popular Pablo Casado congrega a 65.200 followers.
En un tiempo récord, la popularidad del político de Vox en esta aplicación adictiva para millones de jóvenes también es mayor que la de Pablo Iglesias. El presidente de Podemos, uno de los dos otrora partidos emergentes, tiene 109.000 seguidores, mientras que el de Ciudadanos, Albert Rivera, aglutina a 127.000, coronándose aún como el rey de la red de moda.
Ver esta publicación en InstagramHijos de todos los tamaños. Padre x4 #hijos #padre #PadreEhijos
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Salvini, pan y Nutella
Al igual que otros políticos fuera de España como Donald Trump, Mauricio Macri, Emmanuel Macron, Matteo Salvini, Jair Bolsonaro o Narendra Modi, Abascal ha cultivado un estilo propio. Estas navidades ha colgado diversas fotografías con su familia y de paseo por Budapest, con algún guiño incluido al mandatario húngaro, Viktor Orbán.
Sin embargo, los dirigentes españoles aún no han llegado a las cotas de seguidores de otros líderes políticos mundiales. Tampoco han caído en la popular tentación de fotografiar lo que comen para colgarlo en las redes sociales como sí lo hace el ministro del Interior italiano que, horas después del terremoto que sacudió Catania, comentó alegremente que su día comenzaría con un desayuno de pan y Nutella.
Con 1,1 millones de seguidores, Salvini pisa los talones en Instagram a algunos de los líderes políticos más populares de la aplicación en Europa. Según un estudio realizado por la agencia de comunicación Burson Cohn & Wolfe (BCW), un total de 92 jefes de Estado, 48 presidentes de Gobierno y 36 ministros de Relaciones Exteriores tienen cuentas personales en esta red social que triplica en usuarios a Twitter.
Diplomacia digital
Hasta el 1 de octubre de 2018, las 426 cuentas de mandatarios analizadas en el estudio tenían un alcance total de 98,3 millones de seguidores y habían publicado 98.372 entradas en los últimos 12 meses, generando un total de 860,4 millones de interacciones.
En el caso de Europa, la Familia Real Británica ocupa el primer lugar con más de 3,5 millones de seguidores. La foto oficial de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle se convirtió en la más popular de su cuenta en 2018 con más de 660.000 likes. Les sigue Emmanuel Macron con 1,3 millones. Angela Merkel cuenta con más de 680.000 seguidores.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de Emmanuel Macron (@emmanuelmacron) el 23 Dic, 2018 a las 2:03 PST
Como ya ha ocurrido en anteriores ediciones del informe, el rey de Instagram es el primer ministro de India, Narendra Modi, con 14,8 millones de followers. El presidente indonesio, Joko Widodo se ha colocado en segunda posición con 12,2 millones, mientras que el tercer puesto lo ocupa el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con 10 millones de seguidores.
Según el director de Innovación de BCW, Chad Latz, Instagram se ha convertido en la red social "donde los líderes mundiales consiguen mayor cantidad de interacciones". Así, las historias de Instagram se ha convertido en el segundo canal para la diplomacia digital, solo por detrás de Twitter.
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