"No es un don nadie". El cese de Álvaro Sánchez Manzanares como secretario general de Puertos del Estado ha sorprendido a ciertos sectores del PSOE, que conocen al personaje y el rol que ha jugado en los últimos años.
Sánchez Manzanares es un protegido de Pepe Blanco. Y una figura con un pasado relevante en el partido. Fue asesor jurídico de la Gestora tras la dimisión de Pedro Sánchez. A él se atribuye el pacto que permitió al hoy presidente usar casi 100.000 euros recaudados en una polémica campaña de crowdfunding antes de las primarias del 2017, según explican fuentes socialistas a Vozpópuli.
"No es una persona cualquiera, ni un mindundi que pasaba por ahí", explican estas fuentes. "Este cargo cesado ha tenido responsabilidades orgánicas en el PSOE muy importantes".
Un protegido por Pepe Blanco
Sánchez Manzanares se ha convertido en el primer alto cargo de un Ministerio destituido por el caso Koldo-Ábalos. El titular de Transportes, Óscar Puente, le ha fulminado tras confirmarse que mintió al negar que conocía al presunto comisionista de la trama, el empresario Víctor de Aldama.
La destitución tiene su importancia. A pesar de ser el secretario general, se le considera el verdadero cerebro en la sombra de Puertos del Estado. No sólo porque lleva en este organismo público desde 2009; sobreviviendo a Gobiernos del PSOE y del PP; sino sobre todo por su cercanía a Pepe Blanco, que como responsable del lobby Acento es un poder fáctico del Gobierno.
Hay publicaciones especializadas del sector del Transporte que atribuyen a Sánchez Manzanares el poder real en Puertos del Estado con Blanco moviendo los hilos desde Acento.
Sánchez Manzanares fue concejal del municipio madrileño de Las Rozas entre 2007 y 2010. Fue en la agrupación del PSOE de esta localidad donde trabó relación con Blanco, entonces todopoderoso secretario de Organización de José Luis Rodríguez Zapatero.
Blanco, que residía en Las Rozas, le captó como director de Relaciones Institucionales e Innovación Tecnológica de Puertos del Estado en 2009, nada más asumir el Ministerio de Fomento (2009-2011). Uno de los favores que Blanco pidió a su sucesora en el Ministerio Ana Pastor cuando el PP ganó las elecciones del 2011 fue mantener a su protegido en el organismo. Así lo hizo. Y se quedó en una de las jefaturas de área de Asesoría Jurídica en las Ofertas de Empleo de Puertos del Estado (OPPE).
El crowdfunding de Pedro Sánchez
Mientras desempeñaba esta labor de carácter secundario en un Ministerio del PP, Sánchez Manzanares fue subiendo la escalera del PSOE siempre a la sombra de su mentor. Formó parte de la comisión de ética y garantías nombrada en el 38º congreso federal que Alfredo Pérez Rubalcaba ganó a Carme Chacón.
Pero su papel más relevante en el partido llegó tras el estallido del PSOE en el comité federal del 1 de octubre del 2016 y la posterior dimisión de Sánchez por la abstención del partido ante la investidura de Mariano Rajoy. En ese momento, Sánchez Manzanares fue elegido asesor jurídico de la Gestora que dirigió el PSOE hasta las primarias de mayo del 2017.
Sus intervenciones fueron decisivas en muchos momentos, ya que el sector sanchista llegó a cuestionar la existencia misma de la Gestora. Sin embargo, Sánchez Manzanares consiguió un pacto en una de las polémicas más importantes de aquel proceso: el crowdfunding que lanzó el presidente del Gobierno para financiar su campaña.
Sánchez recaudó 94.000 euros de 2.800 donantes. La Gestora, por indicación de Sánchez Manzanares, le obligó a cerrar la campaña de microcréditos en cuando se abrió el proceso oficial de primarias. Para el sanchismo fue una victoria, porque su teoría era precisamente que ese dinero no podía considerarse financiación de campaña al no estar oficialmente convocadas las elecciones internas.
El asesor jurídico que negoció aquel acuerdo con Sánchez Manzanares en nombre de Sánchez fue Andrés Perelló, premiado con la embajada de España ante la Unesco tras la moción de censura.
Koldo y Puertos del Estado
La llegada de Sánchez a La Moncloa también le sentó bien a Sánchez Manzanares, que recuperó mando en Puertos del Estado como secretario general con José Luis Ábalos ya de ministro. Una carrera que ha terminado este martes con su cese fulminante.
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detectó conversaciones y encuentros entre Koldo García -asesor de Ábalos en el centro de la trama- y Sánchez Manzanares a finales del año pasado. Él fue el encargado de firmar uno de los documentos con las adjudicaciones de Puertos del Estado a Soluciones de Gestión.
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