Silencio absoluto. Nadie entre los populares se atrevió en los pasillos del Congreso a respaldar este miércoles a Cristina Cifuentes. Rajoy resopló al ser preguntado a la salida del Pleno por el espinoso asunto que pone en la picota la presidenta madrileña. Sáenz de Santamaría aseguró desconocer la información. Génova decretó cerrojazo informativo durante toda la jornada.
Ni rastro en la Cámara Baja del grupo de parlamentarios populares que apenas veinticuatro horas antes habían jaleado en la comisión sobre la financiación ilegal del PP la comparecencia de la mandataria regional. Aunque el silencio que más impactó fue el de la propia Cifuentes. Veloz de reflejos a la hora de enfrentar cualquier polémica en los medios, su incomparecencia hizo saltar todas las alarmas ante la información desvelada por eldiario.es.
Las explicaciones de la Universidad Rey Juan Carlos sobre la presunta manipulación de las calificaciones del máster en Derecho Autonómico que cursó en 2012 no convencieron a la oposición. Todo fue un error a la hora de transcribir las notas, aseguró el rector de la institución pública, Javier Ramos, en una comparecencia ante los medios donde desmintió cualquier irregularidad.
Con todas las cautelas, todos los partidos la noticia como un golpe duro para la carrera de la presidenta regional y exdelegada del Gobierno en Madrid. "Si finalmente se demuestra, está políticamente frita", aseguraban fuentes de Ciudadanos, el socio de Gobierno de la Comunidad de Madrid. "Lo sensato es esperar a que hable, que dé su versión de los hechos y tomaremos las decisiones oportunas", dijo el portavoz del partido naranja en la Asamblea, Ignacio Aguado. El punto tres de su pacto de investidura se refiere explícitamente a la falsificación del currículum como causa de dimisión del candidato.
Desde Podemos se lanzaron a la yugular de la máxima responsable madrileña. "Su dimisión debe ser inmediata", manifestó Pablo Iglesias. Está "éticamente inhabilitada", aseguró el secretario general de Podemos en la Comunidad, Ramón Espinar. Este dejó caer la posibilidad de abrir conversaciones con otros grupos para intentar una hipotética moción de censura. Más cauto se mostró, sin embargo, el candidato 'oficioso' que deberá disputar la presidencia en 2019, Íñigo Errejón. "Todo el mundo tiene derecho a explicarse", apuntó.
El secretario general de los socialistas madrileños, José Manuel Franco, exigió explicaciones y no descartó la posibilidad sugerida por Espinar si la versión que Cifuentes ofrezca previsiblemente este jueves en la Asamblea no convence. "Hace falta una aclaración explícita, verosímil y convincente de lo sucedido. (...) Se trata de un asunto de gravedad", zanjó el portavoz socialista en la Cámara regional, Ángel Gabilondo.
Su grupo registró durante la tarde una petición para que tras el Pleno de este jueves se aborde una sesión extraordinaria donde Cifuentes pueda dar explicaciones. Podemos y socialistas apuntan con el dedo al partido de Albert Rivera como el único que puede dar un vuelco a la política madrileña tras un escándalo que deja temblando al PP regional cuando sólo falta un año de las elecciones.
La hipotética salida de Cifuentes de la presidencia dejaría un PP descabezado con dificultad para encontrar un recambio viable a un año de los comicios autonómicos de 2019. El panorama en el Consistorio de la capital tampoco es alentador para los populares, tras la salida hace un año de Esperanza Aguirre.
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