El Ayuntamiento de Madrid no podrá instalar una biblioteca gastronómica y un restaurante en el Palacio de los Vargas, en la Casa de Campo, debido a que cualquier uso deberá ser aprobado por la Comisión Local de Patrimonio que no aceptará esta propuesta. La comisión está formada por la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento y el Colegio de Arquitectos.
Hace algunas semanas el Ayuntamiento anunció que tenía intención de convertir esa edificación histórica en una biblioteca y centro de estudios gastronómicos. El invento ha tenido desde el primer momento la oposición de la dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid, ya que todo el recinto de la Casa de Campo, y el propio palacio, están declarados Bien de Interés Cultural (BIC) y como tal tiene que recibir autorización de la comisión de Patrimonio.
La declaración de BIC señala que los usos que se pueden poner en marcha, tanto en el recinto como en el palacio, deben estar relacionados con la Casa de Campo. Otra de las entidades que se ha opuesto a esta biblioteca gastronómica es 'Salvemos la casa de Campo', un combativo grupo que viene denunciando desde hace años las agresiones a este pulmón madrileño.
Representantes de esa asociación se han reunido ya dos veces con la alcaldesa, Manuela Carmena, para hablar del Palacio de los Vargas. La última ha sido este mismo mes de noviembre, sin que hubiera acuerdo “aunque hubo cordialidad”. Personas que estuvieron en la reunión indicaron que Manuela Carmena defendió la idoneidad de la propuesta de la biblioteca gastronómica y restaurante y descalificó los usos del Palacio de los Vargas como centro de interpretación o museo, tal como defiende esta asociación e incluso la propia Comunidad de Madrid.
'Salvemos la Casa de Campo' no desprecia la gastronomía como hecho cultural, pero consideran que ese palacio no es el lugar adecuado para desarrollar un centro de este tipo. "El palacete de los Vargas tiene unos valores históricos y unas potencialidades sobre el Real Sitio de la Casa de Campo -señalan en esta asociación- que podrían frustrarse. Su propuesta podría estar en otro lugar de la Ciudad e incluso en el Pabellón de Valencia de la Casa de Campo como ya se lo sugerimos anteriormente".
Carmena no aceptó la opción del Pabellón de Valencia para ser la sede de este centro de gastronomía. Entre algunos componentes de 'Salvemos la Casa de Campo' hay una “enorme decepción con el Ayuntamiento”, pues pensaron que la llegada de Ahora Madrid, con los que algunos de sus miembros se sienten cercanos, iba a solucionar algunos de los problemas de este gran espacio histórico.
Insisten en que la postura de pedir otro fin para el palacio “es que hablamos sobre los valores históricos que tiene el parque en razón a su pasado como Real Sitio que le han conferido la calificación de Bien de Interés Cultural desde el año 2010”.
Recuerdan que en el documento del BIC “existe una prescripción de usos para el núcleo histórico que debe ser tenida en cuenta”. En este último encuentro se propuso una reunión en la Real Academia de las Artes de San Fernando que se producirá en las próximas semanas. La Asociación cree que el centro de divulgación del recinto debería estar situado en palacete, “el lugar más visible y simbólico de la Casa de Campo, lugar de contacto con el visitante donde haya información del presente del parque y exposiciones eventuales sobre las numerosas facetas que tiene este lugar, sala de reunión o conferencia, etc.”.
Otro de los espacios debería incluir su pasado y su vinculación con las Grutas y el Jardín. También piden que la dirección del parque esté en el palacete por ser el lugar más representativo. Carmena insistió en que el restaurante sea un elemento de consenso, lo que ‘Salvemos la Casa de Campo’ no acepta. El bar debe ser “un elemento secundario, mínimo o incluso no existir”.
La dirección de Patrimonio de la Comunidad de Madrid ha organizado para las próximas semanas unas jornadas sobre la Casa de Campo en la Escuela de Arquitectura donde ‘Salvemos la Casa de Campo’ espera que se puedan hacer propuestas que defiendan una de las zonas más emblemáticas de la ciudad.