El Congreso prevé aumentar en algo más de 600.000 euros la partida reservada para abonar complementos de sueldo a los diputados, un incremento del 11,54% respecto a la cifra que rige desde 2016 y que se explica por la existencia esta legislatura de más comisiones parlamentarias.
Así consta en el borrador de Presupuestos del Congreso para 2017 al que ha tenido acceso Europa Press y que la Mesa de la Cámara tiene previsto aprobar el próximo martes.
La institución diseña sus propias cuentas, aunque después éstas se recogen en el proyecto de ley de Presupuestos Generales que aprueba el Gobierno y que, en esta ocasión, prevé recibir el visto bueno del Consejo de Ministros el próximo viernes.
El borrador de presupuestos elaborado por la Cámara, que viene a actualizar el que se diseñó en 2015 y que sigue vigente por la prórroga del pasado año, contempla un aumento del 0,68% respecto a los de 2016, pasando de 85,51 a 86,09 millones de euros, es decir, 582.061 euros más. El incremento se debe fundamentalmente a la subida del 5,77% que prevé para sus gastos de personal.
Esta partida es la más cuantiosa, pues engloba las retribuciones a los diputados, los funcionarios, el personal eventual y el personal laboral de la Cámara. Frente a los 36,08 millones previstos para 2016, para este ejercicio se han presupuestado un total de 38,16 millones.
Los sueldos de los diputados, congelados desde 2010
Las retribuciones básicas de los diputados (la denominada asignación constitucional que equivale al 'sueldo base' de sus señorías) continuará congelada, según el borrador, en 2.813,87 euros al mes, la misma cantidad que perciben desde 2010.
El Congreso tampoco augura subidas salariales para los funcionarios (para los que se reserva un monto total de 1,71 millones) ni para el personal laboral (3,79 millones), aunque todo queda a expensas de la negociación que tiene abierta Hacienda con los sindicatos de Función Pública.
Donde sí hay variaciones, al alza, es en las cantidades destinadas al pago de retribuciones complementarias de los altos cargos, los complementos que cobran los diputados por razón de sus responsabilidades parlamentarias.
Esta partida crece en un 11,54%, al pasar de los 5,34 de 2016 a 5,95 millones, es decir 616.493 euros más. El motivo es que ahora en el Congreso funcionan cuatro comisiones más que en la X Legislatura, y se espera crear otras dos más de investigación antes del verano. Es decir, hay que pagar más complementos porque hay más Mesas de comisión con sus respectivos presidentes, vicepresidentes, secretarios y más portavoces titulares y adjuntos en cada una de ellas.
Los presidentes de comisión cobran un complemento de 1.431,31 euros al mes, los vicepresidentes de las mesas y los portavoces de los grupos en dichos órganos perciben un plus de 1.046,48 euros, mientras que los secretarios de las mesas y portavoces adjuntos suman a su sueldo otros 697,65 euros mensuales.
En total, el dinero reservado para retribuciones de sus señorías, tanto la asignación básica como los distintos complementos, experimenta una subida global del 3,25% respecto a 2016 (19,6 frente a los 18,99 millones del año anterior).
Más gasto en personal eventual
Y también se prevé gastar más dinero en las retribuciones básicas de los trabajadores eventuales, que eran de 7,56 millones y se quedan en 9, un 19,04% y 1,43 millones más. En paralelo, se incrementa en un 5,45% la cantidad prevista para el pago de cuotas a la Seguridad Social.
No obstante, la mayor subida en el capítulo de gastos de personal se registra en las cantidades destinadas a las retribuciones extraordinarias del personal laboral, en concreto un 66,67%, ya que crecen en 20.000 euros hasta llegar a los 50.000.
Respecto al resto de capítulos del presupuesto, el mayor recorte se contempla en el relativo a las inversiones reales, que cae en un 6,02%, hasta los 3,26 millones, gracias al ahorro previsto en la compra de mobiliario, enseres y otros activos materiales.
Se gastará menos en muebles, material y suministros
El Congreso también espera gastar menos en bienes y servicios, para lo que se presupuestan 33,88 millones, frente a los 35,27 de este año, casi un 4% menos. En este apartado se incluyen las dietas o indemnizaciones por razón del servicio, donde también hay variaciones respecto al ejercicio anterior.
En concreto, se recortan un 28,57% las dietas que se pagan a las personas que acuden a comparecer en el Congreso (25.000 euros) y en un 25% las que percibe el personal de dirección por asistir a cursos (4.500 euros). La previsión para viajes oficiales se mantiene en dos partidas de 330.000 y 28.000 euros, respectivamente.
Además, el Congreso augura gastar menos en publicaciones (24,61%) en seguridad (25%), transporte (4,41%), material de oficina (42,86%) y en suministros, donde los recortes más importantes se registran en las partidas para combustible (81%) y energía eléctrica (20,72%). Eso sí, para gas se presupuesta un 163,64% más (de 100.000 a 263.636 euros).
Por contra, se incrementará en un 0,97% el capítulo de transferencias corrientes (10,78 millones) en el que se incluyen las subvenciones a los grupos parlamentarios, que se mantienen en 9,40 millones. Respecto a los gastos financieros, se calculan 4.000 euros de intereses de depósitos, la misma cantidad que en el ejercicio anterior.
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