"Hemos aumentado las expulsiones de migrantes irregulares, pero siguen siendo insuficientes". Así se expresó este miércoles el canciller alemán, el socialista Olaf Scholz, en plena ronda de contactos con el resto de formaciones políticas para adoptar medidas de choque que palien los efectos de la llegada desbocada de migrantes y refugiados en los últimos años. Desde 2015, Alemania ha recibido más de millón y medio de refugiados que todavía siguen en el país. Y sólo el año pasado, recibió a 266.000 migrantes irregulares. "No podemos seguir tal cual", zanjó el líder del Ejecutivo alemán y tándem con Pedro Sánchez en las negociaciones de los intereses socialistas en Bruselas.
Por ello, Scholz anunció que se estudian medidas para intensificar la repatriación de migrantes, la lucha contra el terrorismo islamista o el derecho a portar armas. Unos ajustes que la socialdemocracia alemana promoverá desde el Bundestag en un doble contexto: el triple crimen de Solingen y las elecciones en Turingia y Sajonia del próximo domingo. Reivindicado el atentado por Estado Islámico, que el asesino confeso sea un sirio de 26 años con una orden de repatriación no ejecutada ha inflamado las posibilidades de Alternativa por Alemania (AfD) y BSW, la izquierda antimigración escindida de Die Linke.
España es un socio fiable para Gambia y continuaremos nuestra colaboración bilateral.
Hoy hemos firmado un Memorando de Entendimiento en materia de migración circular.
El presente y el futuro de África, su prosperidad, su seguridad y su progreso hacia un desarrollo… pic.twitter.com/bofSSCabpw— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) August 28, 2024
Se trata de una batería de medidas que nada tiene que ver con la anunciada por Pedro Sánchez durante las dos primeras paradas de su gira africana, Mauritania y Gambia. Por el contrario, el presidente del Gobierno ha defendido una migración "segura, ordenada y regular" formada en origen como la mejor manera de luchar contra la llegada irregular de personas a nuestro país. Sánchez ha defendido la formación en origen, tanto a profesionales como a agentes locales, e incrementar la presencia de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. En Gambia, por ejemplo, hay cuatro efectivos de la Policía Nacional y otros seis de la Guardia Civil trabajando en colaboración con las autoridades locales.
No obstante, para el principal partido de la oposición, lo anunciado por Sánchez tendrá un efecto bumerán y se dirige justo en la dirección opuesta a las necesidades del país. "Mientras Alemania e Italia hablan de deportaciones masivas y acuden a los países de origen para frenar la salida de esos inmigrantes irregulares, Sánchez habla de regularizaciones masivas y acude a los países de origen a alentar las salidas, que es lo contrario de lo que habría que hacer en estos momentos", dijo este miércoles Miguel Tellado, portavoz popular en el Congreso, en una entrevista en esRadio.
Parecidos con el 'Plan Mattei'
Lo cierto es que el canciller alemán lleva meses hablando de la posibilidad de emprender deportaciones a "gran escala" para paliar los desajustes poblacionales. Sorprendió el pasado mes de octubre, hace ya casi un año, con ese mismo titular en una entrevista para Der Spiegel, el semanario más influyente de Europa. Scholz abrió la espita a las medidas que está a punto de intensificar asegurando que "vienen demasiados" inmigrantes a Alemania y que generan inseguridad. "Debemos deportar más y más rápidamente", zanjó, sin paños calientes, el canciller alemán.
Fuentes del equipo de Alberto Núñez Feijóo consultadas por este periódico descartan que ellos vayan a emplear esos términos, si bien las reacciones de todos los dirigentes han censurado los planes de Sánchez. Para el principal partido de la oposición, fomentar la migración regular puede "alentar un efecto llamada en la peor crisis de migración irregular", según expresó el líder del PP en la red social X. "En vez de ir a África a combatir las mafias, Sánchez promociona España como destino. Al revés que el resto de la UE. Quien venga, contrato en origen y carta de cumplimiento de nuestras leyes", apostilló.
Para Alicia García, portavoz popular en el Senado, "lo que quiere hacer [Sánchez] es ir al revés que están otros responsables, otros líderes europeos y pongamos el ejemplo de Alemania o de Italia". Una muestra más de cómo el PP indica explícitamente la 'vía Scholz' y la 'vía Meloni' para combatir el flujo migratorio irregular. No obstante, la hoja de ruta emprendida por Sánchez sí guarda ciertas similitudes con el Plan Mattei con el que la primera ministra italiana ha reducido 64,6% la llegada de migrantes en lo que llevamos de 2024.
Y es que mientras el Ejecutivo italiano, capitaneados por su ministro del Interior, Matteo Piantedosi, anunció en enero de este año un acuerdo de colaboración con diversos países africanos (Marruecos, Argelia, Túnez, Mozambique, Egipto, Congo, Etiopía, Kenia y Costa de Marfil) para invertir 5.500 millones de euros en planes de cooperación.
En el caso de España, tras los 500 millones de euros invertidos al alimón con la Unión Europea para el impulso de Mauritania hace sólo seis meses, Sánchez ha anunciado la aparentemente escueta cifra de 500.000 euros más para mejorar la seguridad de sus fronteras. No obstante, la gran apuesta ha sido la de la "migración circular". Es decir, que sean mauritanos parte de los 250.000 trabajadores que la AIReF calcula que España necesita para no resentirse del invierno demográfico, de la falta de mano de obra presente y futura. Pronto veremos si el plan de Sánchez funciona y no. Y qué medidas más diseña el Gobierno para frenar la llegada en aluvión de cayucos a Canarias.