Nadie en Génova se aventura a pronosticar cuándo habrá elecciones, hasta dónde llegara Pedro Sánchez, cuál será el futuro procesal de su mujer, Begoña Gómez; qué pasará con los cinco delitos por los que el Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz investiga al hermano del presidente, David Sánchez Pérez-Castejón; si lo que ocurra en Cataluña dinamitará la legislatura, si el líder socialista será capaz de seguir sobreviviendo a la endiablada (y famélica) mayoría parlamentaria que lo sostiene, cuáles serán las penas y las consecuencias del caso Koldo... En definitiva, cuánto durará Sánchez en la jungla de cristal en la que ha convertido su singladura política, sostenida única y exclusivamente en su archiconocido manual de resistencia.
Lo que sí tiene claro el PP a qué le recuerda, a qué le sabe su situación actual. Cerca de esas puertas que más bien son biombos que separan el menudeo informativo del hemiciclo, en el pasillo, uno de los miembros del equipo de Alberto Núñez Feijóo lo explicaba el pasado miércoles, después de que saltara la enésima noticia comprometedora para la mujer del presidente, de forma casi proustiana. "Le está pasando como nosotros con la Gürtel", evocaba las postrimerías del PP de Mariano Rajoy, cosido a base de titulares diarios nada halagüeños.
Por ello, la gran obsesión del principal partido de la oposición es jugar bien sus cartas. No activar el ventilador y esparcir unos argumentos que, si bien numerosos, a menudo terminan esparcidos en el discurso sin que nada cuaje. "Begoña, Begoña, Begoña", era la consigna lanzada esta semana en la trastienda del PP. No obstante, las subtramas brotan en la vorágine política. Y ha sido Aitor Esteban, el portavoz del PNV, quien encendió la última bombilla de Génova durante su réplica a Sánchez el pasado miércoles.
"Hay límites más allá de lo penal", dijo Esteban sobre la relación profesional de Begoña Gómez ahora en el punto de mira. "La inmensa mayoría de las leyes actuales no serían suficientes, es importante tener líderes con valores éticos. El problema no es tanto las leyes, sino la falta de cultura democrática en España. Unos contra otros se enfrentan manifestando las discrepancias contra las sentencias de los demás", añadió.
"¿Cuánto más tiempo van a callar?"
Como publicó Vozpópuli, el PP descarta un acercamiento al PNV tras romper con Vox. No obstante, las palabras del hombre fuerte de Andoni Ortuzar en Madrid han abierto una espita a la crítica del resto de socios del Gobierno. "¿Qué dice Sumar? ¿Qué dice Podemos? El otro día el PNV ya empezó a preguntar... pero qué dice ERC, Junts, quienes sustentan al Gobierno. ¿Por qué callan? ¿Por qué miran hacia otro lado?", lanzó este viernes el portavoz nacional de los populares, Borja Sémper, en una comparecencia en las puertas de Génova.
"Hoy hay partidos políticos que están sustentando a este Gobierno y que callan ante una corrupción que ya es insoportable y cuyo hedor trasciende Moncloa y la sede del PSOE y les empieza a llegar a ellos. Ya no cabe más silencio", añadió el portavoz del PP, señalando "singularmente a Sumar", el partido de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. "¿Cuánto más tiempo van a callar ante esto? ¿Este es el sí se puede? ¿Esto no es casta, aprovechándose de su influencia desde el poder para obtener supuestamente algun tipo de rentabilidad política?", la retó.
Como confirman fuentes de Génova consultadas por este periódico, se trata de una estrategia que el PP seguirá explotando. Una manera de presionar a Díaz "y a Podemos" ante un caso que los populares consideran cada vez "más negro" para Sánchez.
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