A las primarias, como a los referéndums, las carga el diablo. Acaba de ocurrir en el Partido Socialista francés y puede suceder también en el PSOE dentro de cuatro meses. Hay dos evidencias que los dirigentes regionales aprecian, sin apenas excepciones: la decantación de la gestora que preside Javier Fernández por Susana Díaz, una apuesta que ha causado un importante roto en la federación asturiana, y la facilidad con la que los responsables de la mayoría de las federaciones condicionarán el voto en las primarias de mayo a favor de la presidenta andaluza en las zonas rurales. “La militancia en las grandes ciudades es otro cantar”, reconoce un alto cargo socialista vinculado a la secretaría de Organización. “Sobre ella va a ser mucho más difícil influir desde los aparatos regionales y, por tanto, puede acabar dando la gran sorpresa, la que espera Pedro Sánchez para recuperar la secretaría general”, añade.
Los aparatos provinciales y regionales del PSOE influyen mucho menos sobre la militancia en las grandes ciudades
Fuentes del PSM acentúan la incertidumbre que supone la celebración de las primarias y el sobresalto que puede surgir en mayo teniendo en cuenta que en ninguno de los procesos celebrados con anterioridad, el que hace 19 años dio el triunfo a José Borrell frente a Joaquín Almunia y el que hace tres aupó al liderazgo del partido a Sánchez frente a Eduardo Madina, ganó el candidato del aparato. “En ambos se dieron las mismas circunstancias que ahora, pues las estructuras regionales y provinciales controlan la militancia de las poblaciones más pequeñas y, en cambio, influyen mucho menos sobre la de las grandes capitales.
Fuentes de Ferraz previenen del caos al que puede abocar la secuencia de las primarias y el 39º congreso de junio si en mayo saliera vencedor Pedro Sánchez, algo que su equipo de confianza ve altamente probable, y un mes más tarde se viera obligado a encarar un cónclave en el que, como es tradición, mandan las diferentes baronías. ¿Qué equipo haría Sánchez? ¿Con quién contaría? ¿Cómo podría integrar si la mayoría de los secretarios generales están con Susana?, se preguntan en la sede federal del PSOE.
Personas afines a Sánchez, como el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, le ven todavía con capacidad para coser heridas y unir al partido en el caso de que vuelva a la secretaría general. Esta tarea podría hacerla en colaboración con Patxi López, el candidato que entona desde la federación vasca un discurso muy parecido al suyo y, además, se ha rodeado de un equipo formado por dirigentes que apoyaron hasta el final al propio Sánchez. Para la candidatura de López trabajan ahora personas como Idoia Mendia, Rodolfo Ares, Óscar López o César Luena, responsable de Organización hasta el pasado septiembre. Su objetivo es, precisamente, hacerse con el voto militante de las grandes ciudades para disputárselo a Sánchez, sabiendo que encontrarán problemas serios en Andalucía, donde lógicamente la penetración de Susana Díaz es muy poderosa. “Después de las primarias, con Patxi el acuerdo será posible, no así con Susana porque los dos se odian a muerte”, señala gráficamente un miembro de la anterior ejecutiva.
Alarmas en Málaga y Cádiz
La federación andaluza avaló mayoritariamente a Sánchez frente a Madina en las primarias celebradas en julio de 2014 y ahora respalda en la práctica totalidad de las provincias a Díaz en su carrera hacia la secretaría general del PSOE. Sin embargo, a la lideresa del sur hace meses que se le han encendido las alarmas en Málaga y Cádiz, ante el avance de las plataformas que apoyan al exlíder socialista, convencidas ya de que disputará esta batalla.
Otro foco de especial atención para Díaz, López y Sánchez se localiza en Cataluña, donde se concentran casi 18.000 de los más de 170.000 afiliados con los que cuenta el PSOE. La mayoría de las federaciones se han hecho a la idea de que el PSC acabará participando en las primarias por mucha resistencia que ponga la presidenta andaluza, la principal perjudicada porque el grueso de la militancia catalana esté con el exsecretario general.
Madina supervisará la ponencia política para restar apoyos a Pedro Sánchez entre la militancia del PSC
En las primarias celebradas hace tres años, Madina ganó a Sánchez en Cataluña por una amplia mayoría, una de las razones que explican, aseguran fuentes socialistas, que la gestora le haya elegido como coordinador de la ponencia política que se debatirá en el 39º Congreso. En la llamada ‘operación Susana’, que cerró su primer capítulo con el desalojo de Sánchez de Ferraz el pasado 1 de octubre, estaba previsto que Madina actuara como portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso. Al final, prefirió ganar tiempo y dejar que fuera Antonio Hernando, uno de los principales altavoces del ‘no es no’ a Rajoy, quien se tragara el sapo de su investidura y gestionara en la Cámara Baja los tiempos hasta que la gestora cese su mandato. Alfredo Pérez Rubalcaba ha estado encima de todas estas decisiones.
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