El discurso de Pedro Sánchez, que degeneró en un mitin político durante su chocante intervención el pasado miércoles en el Parlamento Europeo al alentar el miedo a la "derecha reaccionaria" para estupor de buena parte de la Eurocámara, ha sido visto como el pistoletazo de salida de la campaña electoral de las elecciones europeas, que la propia polarización en España ha dotado de una singular relevancia en todos los sentidos.
En consecuencia, los partidos ya preparan unas candidaturas que estarán previsiblemente copadas por primeros espadas, una vez se ha evidenciado que la pugna doméstica ligada a la merma en el Estado de derecho operada por las políticas de pactos del presidente del Gobierno tendrá su correlato, con toda seguridad, en las instancias comunitarias.
La formación que más se la juega en las elecciones previstas en España el próximo 9 de junio es el PP. Y su previsión de partida es apostar sobre seguro en la elección de su cabeza de lista: Esteban González Pons. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha fundamentado su proyección en las bambalinas comunitarias sobre la idea de que, sobre todo tras la intervención de Sánchez en Estrasburgo, "en Europa ya han empezado a darse cuenta de lo que está ocurriendo en España".
El presidente del PP se ha desplazado esta semana a Bruselas en misión "pedagógica" para contrarrestar el discurso sanchista en torno a cuestiones tan controvertidas como la amnistía a los instigadores del 'procés' o la fiscalización exigida por Junts y ERC a la labor de jueces y magistrados. Se ha reunido con sus correligionarios del PPE (Manfred Weber), pero también con la propia presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para persuadirlos de que la democracia en España está en riesgo flagrante de devenir en otra cosa difícilmente homologable a lo conocido en el club europeo. En todo momento, ha estado acompañado por González Pons, buen conocedor de la moqueta bruselense tras haberla trillado durante casi una década, entre 2014 y el pasado mes de agosto.
Según fuentes del PP, "pese a que restan muchos meses para abordar las candidaturas europeas, González Pons tiene todas las papeletas como cabeza de cartel de las listas del PP. Acumula una gran experiencia y cuenta con una más que reconocida vis parlamentaria", características muy valoradas en un momento en el que las denuncias de los populares están empezando a obtener cada vez más repercusión en Bruselas. "Feijóo no se mueve en la UE sin su orientación, y tiene toda la confianza en su capacidad de desenvolverse en un ambiente que conoce muy bien".
Expectativas frustradas
Repescado para la política nacional con ocasión de la organización del congreso en el que Núñez Feijóo fue proclamado presidente del PP tras el abrupto final de etapa de Pablo Casado al frente del partido, González Pons ha visto en cierta medida frustradas sus expectativas políticas por el propio dictamen que las urnas emitieron para el PP el pasado 23 de julio. La propia designación de Miguel Tellado para sustituir a Cuca Gamarra en la portavocía del grupo popular en el Congreso ha supuesto asimismo una cierta decepción para un dirigente que vio también malograda su previsión de ser ministro en el primer gobierno formado por Mariano Rajoy tras obtener en 2011 una abrumadora mayoría absoluta. Fue el detonante que, tras un periodo de tres años languideciendo como diputado autonómico en las Cortes Valencianas, le llevó a su primera aventura en Bruselas, donde se desempeñó como portavoz de la delegación española del PP Europeo y estableció una importante red de conctactos en las instancias comunitarias.
Mucho 'ministrable' y sin compromisos con las 'vacas sagradas'
Respecto al diseño del resto de la lista, según las fuentes consultadas, hay dos circunstancias que se prefiguran determinantes para la composición de la futura candidatura conjunta. "Por una parte, es previsible pensar que la lista europea puede servir de acomodo para dirigentes que hoy están en el Congreso sin un papel claro, dado que difícilmente preveían que tomarían posesión de sus actas de diputados en la oposición. Son los llamados 'ministrables'". Es el caso, por ejemplo, de Carlos Rojas, actual secretario general del grupo parlamentario popular, con unas funciones actualmente algo desdibujadas.
Por otra parte, las mismas fuentes precisan que Feijóo se siente liberado de compromisos de renovación con algunos 'clásicos' del PP en el Parlamento Europeo. En este sentido, citan los nombres de los exministros Pilar del Castillo y Juan Ignacio Zoido.
Tampoco parece garantizada la continuidad en la lista del extitular de Asuntos Exteriores José Manuel García Margallo pese a que -o precisamente por ello- "ha comenzado ya a moverse para tratar de garantizarse un puesto de salida". El único nombre que se da por seguro que repetirá en Europa es el de Dolors Montserrat.
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