Mismo sitio (oposición), distinto lugar (septiembre de 2024), que canta Vetusta Morla. Porque si el anterior curso político arrancó con el Ejecutivo y el independentismo catalán gestando la Ley de Amnistía, el actual ha dado el pistoletazo de salida con la "financiación singular" de Cataluña –siempre Cataluña– como principal eje del debate. El objetivo Alberto Núñez Feijóo, mientras, sigue siendo el mismo, ya asumido el KO del 23-J: canalizar hacia el PP todo el voto descontento con un Gobierno atenazado por diferentes frentes. La brújula del líder del PP sólo señala el Palacio de la Moncloa, pero cuándo llegará la posibilidad es una incógnita. Eso sí, si hay algo que Feijóo descarta para alcanzar su propósito es emprender una "revolución comunicativa".
"Va a seguir fiel a su estilo", despejan en su equipo sobre un eventual viraje de estrategia de cara a la temporada 2024/2025. Para el expresidente de la Xunta de Galicia es una obsesión transmitir fiabilidad a su parroquia. Nada de inventos. No obstante, el segundo año de legislatura arrancará con el PP cediendo el atril, los cortes de telediario, las cuñas de radio, a nuevas caras. "Nosotros adecuamos los perfiles que tienen el foco a la realidad del momento", justifican en el ala noble de Génova la entrada de savia nueva para dar la batalla al Gobierno.
Se trata de una petición, la de dotar de más protagonismo a diferentes vicesecretarios, transmitida a Feijóo por multitudes voces del partido. El líder del PP ha recogido el guante, y el principal partido de la oposición incorporará "nuevos perfiles comunicativos" que se sumarán a la secretraria general, Cuca Gamarra, al portavoz nacional, Borja Sémper, o al portavoz en el Congreso, Miguel Tellado. Hablamos de dirigentes de máxima confianza de Feijóo como Juan Bravo, vicesecretario de Economía, Carmen Fúnez, vicesecretaria de Organización, y Ester Muñoz, vicesecretaria de Sanidad y Educación.
Miembros de la cúpula que asumirán "nuevos roles" como, en ocasiones, cuando el asunto versa sobre materia internacional o justicia, lo hace Esteban González Pons, el hombre que negoció junto al ministro Félix Bolaños la renovación del Consejo General del Poder Judicial y rubricó el acuerdo en Bruselas el pasado 25 de junio. Además, tras un 2024 marcado por un intenso carrusel electoral –Galicia, País Vasco, Cataluña y Europa–, ya no hay candidatos que "absorban el foco de Génova". O lo que es lo mismo: el PP encara un año de pura oposición a Sánchez.
Bravo, 'el hombre de los números' de Feijóo
"La financiación autonómica va a darle a Juan un protagonismo notable, porque hablamos de dinero, y él es nuestro hombre de los números", explican desde el entorno de Feijóo. "El marco político va a devolver a Juan a una primera línea mediática", reiteran tras la paulatina pérdida de protagonismo del vicesecretario económico del PP después de un año marcado por la Ley de Amnistía, la explosión del 'caso Koldo' o la entrada en escena de la sospechosa actividad privada de la mujer del presidente, Begoña Gómez. Asuntos netamente políticos, lejos del rol económico que juega Bravo en el equipo.
El exconsejero de Hacienda de Juanma Moreno en la Junta de Andalucía, encargado de confrontar de tú a tú tanto en el Congreso con la vicepresidenta primera y ministra del ramo, María Jesús Montero, será quien más ahonde en los argumentos del PP contra el "concierto separatista" y por qué generaría un país "con españoles de primera y de segunda". Después de aterrizar en Génova junto a Feijóo en abril de 2022, Bravo ejerció un papel destacado en las –infructuosas– negociaciones con Montero para sacar adelante los paquetes de choque para paliar los efectos de la guerra de Ucrania para, después, decíamos, perder cuota de protagonismo.
Su trabajo junto a los consejeros de Hacienda del PP para armar una alternativa al actual sistema de financiación autonómica, no obstante, ha sido intenso en los últimos meses. Los populares, como reconoció el propio Bravo en una entrevista en Vozpópuli publicada este domingo, presentarán su propuesta sólo cuando lo haga el Gobierno. "Parece lógico que sea la ministra Montero la que lidere el proyecto", justificaba. ¿Las claves del plan del PP? Un sistema multilateral, un fondo transitorio, tener en cuenta variables como la dispersión poblacional, el envejecimiento o los costes de vida e igualdad para todos los territorios.
Fúnez, a las riendas del aparato
Carmen Fúnez reapareció en Génova el 18 de enero de 2023 como parte del equipo que, liderado por exministro Íñigo Gómez de la Serna, elaboró el programa marco para las elecciones municipales y autonómicas de ese año. Tras desempeñarse como asesora en el Parlamento de Andalucía y en el Senado, Feijóo culminaba la vuelta, con más galones que nunca, de un activo de su máxima confianza. Un extremo, este último, subrayado por numerosas fuentes consultadas por este periódico. "Carmen es la tercera voz interna del partido tras Feijóo y Cuca, aunque tenga un trabajo más de asuntos internos. Es una buena comunicadora y puede tener más recorrido mediático", justifican las fuentes consultadas.
La intención del líder del PP, ahora, tras entregarle las riendas del aparato el pasado noviembre, es explotar sus "cualidades comunicativas" frente a las cámaras. Y es que la sustituta de Tellado al frente de la vicesecretaria de Organización del PP, tras ocupar durante ocho meses Políticas Sociales, "tiene mucha mili", conoce a la perfección el ADN ideológico de la formación y también al grueso de sus dirigentes desde hace décadas. Porque ligada al partido desde la adolescencia, Fúnez presidió Nuevas Generaciones entre 2001 y 2006. Una nota, la de haber pertenecido a las juventudes del partido, cada vez más común en la clase política española.
Ester Muñoz, la apuesta del líder
Se trata de una apuesta personal del líder del PP, que en noviembre del año pasado la introdujo en la cúpula del partido como vicesecretaria de Sanidad y Educación. Una remodelación que también llevó al Comité de Dirección a la madrileña Noelia Núñez (32 años), en calidad de vicesecretaria de Movilización y Reto Digital, para contar con un prisma joven en la toma de decisiones. "Como en el Madrid, aquí contamos con veteranos y noveles, desde los 31 años de Noelia Núñez a los 65 de Javier Arenas", justificaban entonces en la sede nacional de los populares.
No obstante, a sus 39 años, Ester Muñoz cuenta con una dilatada experiencia dentro del partido. Un "importante conocimiento orgánico" forjado en Nuevas Generaciones, intensificado como asesora en Génova y en la Junta de Castilla y León y que empezó a despuntar tras ser elegida senadora en 2016. "A Feijóo le gusta mucho como comunica, quiere que tenga protagonismo", insisten en el entorno del gallego. Si bien ya ha ofrecido ruedas de prensa en la sede nacional y entrevistas en momentos de importante foco informativo, la diputada leonesa está llamada a gozar de más minutos de telediario en los próximos meses.
