Política

Iglesias entrega la portavocía de Podemos a Isa Serra para evitar una guerra interna en Madrid

La diputada regional aspiraba a liderar el partido en la capital para sortear la posible inhabilitación tras la condena a 19 meses por su participación en un desahucio

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha logrado evitar in extremis un conflicto interno en Podemos Madrid tras un enfrentamiento entre dos dirigentes del partido que aspiraban al liderazgo en la capital. Por un lado, se encontraba Isa Serra, diputada regional que entró en la Asamblea gracias a un ajustado 5,6% de votos en 2019 y que quería reciclarse en la dirección regional por temor a una inhabilitación. Por el otro, el concejal de Alcorcón Jesús Santos, quien se consideraba el barón in pectore de Madrid desde hace tiempo.

Serra reveló a personas de su confianza su intención de liderar Podemos Madrid. Así lo revelan fuentes de la formación a Vozpópuli, que recuerdan como en un primer momento la dirección nacional había barajado el nombre de Juanma del Olmo, persona del círculo de confianza de Iglesias y que procede del sector de Irene Montero.

El nombre de Del Olmo circuló hace un año, cuando la formación sufrió el golpe de Íñigo Errejón, que salió del partido cuando era candidato a las autonómicas y se sumó a la plataforma de Manuela Carmena. Entonces, Jesús Santos, del sector pablista, lanzó su candidatura con la intención de resolver los problemas internos de la agrupación madrileña, la más numerosa a nivel nacional.

Santos obtuvo el respaldo de la cúpula del partido en las elecciones locales de Alcorcón, donde deseaba hacerse con la alcaldía. En Alcorcón (169.000 habitantes), Podemos activó su colaboración con la consultora Neurona, vinculada a Juan Carlos Monedero, y que antes había trabajado para Evo Morales y López Obrador.

La consultora asesoró a Santos aportando técnicos de campaña electoral y expertos en redes sociales procedentes de América Latina. Concretamente, de México. Sin embargo, el resultado de Ganar Alcorcón no fue del todo exitoso. Alcanzó un 17% de votos, insuficientes para hacerse con la alcaldía, pero sí para “presumir” en el desplome general de Podemos en esos comicios. Después de la convocatoria de Vistalegre 3, Santos trabajó para que su nombre apareciera en las quinielas de la futura dirección regional.

Renuncia a cambio de un cargo

En ese momento también Isa Serra se interesó por la dirección regional. Hace dos semanas, sin embargo, de manera sorprendente, lanzó un tuit en el que anunció su apoyo a la candidatura de Santos. Fuentes de Podemos apuntaron a que la diputada regional, que es también pareja de Del Olmo, había renunciado a cambio de un cargo. El pasado sábado, el líder morado anunció que Serra se incorporará como nueva portavoz, con Rafa Mayoral en la coportavocía. Serra toma el relevo de Idoia Villanueva.  

Fuentes de Podemos aseguran que Iglesias ordenó evitar una pugna interna en un momento muy delicado por su presencia en el Ejecutivo. Del Olmo recibió presiones de ambos bandos para que se decantara a favor de unos o de los otros, y finalmente el partido apostó por una decisión salomónica.

De izquierda da derecha: Pablo Echenique, Pablo Iglesias, Noelia Vera, y los diputados Juan Manuel del Olmo y Rafael Mayoral Peral

Sin debate interno

El resultado de esta política es que en Madrid, comunidad con más inscritos, el debate interno estará totalmente ausente. La lista de Jesús Santos es la única que se presentará para liderar el territorio que antes dirigió Ramón Espinar tras la dura pugna con Rita Maestre de 2016.

La lista de Santos goza, además, del respaldo directo de Iglesias. Recupera el lema “Podemos contigo”, que fue el mismo de la candidatura del secretario general en Vistalegre 3: una práctica que choca con las anteriores prácticas del partido. En algunos territorios, los candidatos apoyados por la dirección aparecen incluso vinculados al “Equipo Pablo Iglesias”.  

La pugna de Serra para obtener un cargo en el partido revela, por otro lado, la preocupación de la dirigente de perder el escaño en la Comunidad de Madrid. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) la condenó a 19 meses de prisión por los delitos de atentado a la autoridad, lesiones leves y daños por su participación en un desahucio de 2014.

La diputada ha recurrido la sentencia. Iglesias también ha criticado en el Congreso y en al Palacio de la Moncloa el fallo judicial, cuestionando la neutralidad de los jueces. Si la diputada recibe un dictamen definitivo en contra deberá salir del parlamento autonómico, perdiendo el salario correspondiente. Pero gracias a su nuevo nombramiento ha encontrado una vía segura para permanecer en la política.

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