Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso compartieron pupitre. Era diciembre de 2011 y el futuro político del primero estaba igual de gélido. No había logrado repetir escaño en las elecciones de noviembre que perdió el PSOE, así que decidió aprovechar su tiempo para potenciar su perfil académico. Un año antes se había matriculado en la Universidad Camilo José Cela para escribir una intrigante tesis que no leyó hasta 2012.
La dirigente popular corría mejor suerte. Había trabajado como asesora de Esperanza Aguirre y, tras un periodo de incertidumbre, la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid dio su visto bueno para que fuera incluida como candidata de la lista del PP para los comicios a la Asamblea de Madrid de 2011. No fue elegida diputada, pero entró en la IX legislatura el 15 de julio para cubrir la vacante por renuncia de Engracia Hidalgo.
La segunda edición del programa '¿Cómo ganar las próximas elecciones? Dirección de Campañas Políticas' del IESE Business School de la Universidad de Navarra logró reunirles bajo el techo de la misma clase. Estaba impartido por Steve Jarding, profesor de políticas públicas de la Kennedy School of Government de la Universidad de Harvard y asesor de varios senadores del Partido Demócrata.
Un 'king maker' electoral
Jarding, a quien muchos consideran un king maker (hacedor de reyes) electoral, no solo captó el interés de candidatos políticos y cargos electos de PP y PSOE. Aunque eran tiempos de bipartidismo, el actual diputado de Vox Víctor Sánchez del Real -que en 2011 estaba al frente de una compañía de comunicación- también vio en este curso una oportunidad para seguir creciendo profesionalmente.
Según ha podido saber este diario, el diputado por Badajoz del partido liderado por Santiago Abascal había colaborado en el lanzamiento de la primera edición del curso. Después se matriculó como alumno y coincidió con Sánchez y Díaz Ayuso.
El programa estaba dirigido por el economista y doctor en Sociología José Ramón Pin y costaba cerca de 3.000 euros. Se impartió en Madrid entre los días 13,14 y 15 de diciembre bajo el paraguas del recién creado Center for Public Leadership and Government CPLG de IESE, centro que entonces dirigió Antonio Núñez.
Las clases consistían en conferencias y talleres, la mayoría de ellos impartidos por el reconocido asesor estadounidense. El almuerzo estaba incluido, pero no el alojamiento. Las presentaciones eran en el idioma original de cada ponente, pero había traducción simultánea inglés-español en todas las sesiones. Sánchez ya habría destacado por su inglés fluido.
Había también candidatos a procesos electorales de otros países y asesores en gabinetes de líderes públicos. En total, sumaban cerca de treinta alumnos.
Los líderes se centran en las siguientes generaciones, los políticos miran sólo por las próximas elecciones"
"No adornes quién eres en tu CV"
El folleto con el que IESE Business School cautivó al actual presidente del Gobierno y compañía advertía que el desarrollo de campañas políticas era un proceso cada vez más complejo. "Un análisis certero de los ambientes externos e internos puede resultar decisivo para el resultado en las urnas. Por tanto, se requiere del profesional que lo diseña y dirige un grado de especialización cada vez mayor", señalaba.
Entre los consejos que Jarding brindó a sus pupilos destacaba el de no maquillar el CV. "No adornes quién eres en tu currículum o, de lo contrario, volverá para atormentarte". Además les pedía que siempre fueran honestos sobre cuánto dinero iban a necesitar para ganar.
Siguiendo o no sus consejos, Pedro Sánchez consiguió convertirse en por primera vez en presidente del Gobierno de España mediante una moción de censura contra Mariano Rajoy. Dos elecciones generales le dieron la victoria en las urnas. Finalmente logró ser investido con una mayoría pírrica.
Nueve años después de su paso por las aulas del IESE Díaz Ayuso se ha convertido en presidenta de la Comunidad de Madrid y el empresario Víctor Sánchez del Real forma parte de los 52 diputados que han convertido a Vox en tercera fuerza política del Congreso.
No es extraño ver cómo el mandatario socialista y el parlamentario de Vox se saludan en el Heminiclo. Además de coincidir en la misma clase con Jarding como mentor, ambos comparten apellido, por lo que son llamados a votar uno detrás de otro.
