La Policía Nacional ha hallado nuevas pinturas efectuadas en la casa que el juez Pablo Llarena tiene en el municipio gerundense de Das. Radicales han dejado en torno a la residencia mensajes amenazantes como la frase “1-O, ni olvido ni perdón”. Se suman al ataque sufrido por el magistrado esta semana en su casa de Sant Cugat (Barcelona) cuyo portal apareció cubierto de pintura amarilla.
Tras esa acción, llevada a cabo la madrugada del miércoles por miembros de Arran (grupo juvenil de izquierda independentista vinculado las CUP), la Policía Nacional consideró oportuno enviar a varios agentes del puesto fronterizo de Puigcerdá a la residencia del juez en Das. Según informan a Vozpópuli fuentes policiales, al llegar se toparon con que alguien ha realizado nuevas pintadas en la casa, que ya fue fruto de un ataque similar por parte de Arran el pasado 25 de marzo.
En concreto son tres pintadas nuevas. Sobre el buzón de la casa han dibujado un “155” en color rojo en relación a la aplicación del artículo de la Constitución en virtud del cual el Gobierno decidió suspender la autonomía una vez que el Gobierno encabezado por Carles Puigdemont impulsó la declaración unilateral de independencia en el Parlament.
Sobre el buzón de la casa han dibujado un “155” en color rojo
Tres nuevas pintadas
La amenaza “1-O, ni olvido ni perdón” ha aparecido dibujada sobre la calzada, también en color rojo. Hace referencia a las cargas policiales durante el referéndum ilegal. La tercera pintura es un lazo morado, que ha aparecido sobre la caja del contado de la luz de la casa.
Las misma fuentes consultadas indican que no se puede precisar la fecha en la que se han hecho estas nuevas pintadas, que no han sido denunciadas. Tampoco llevan la firma concreta de Arran o algún CDR de la zona por lo que es difícil precisar la autoría.
También ha aparecido un lazo morado sobre la caja del contado de la luz de la casa
Tras el ataque de marzo, el Ministerio del Interior aseguró que había reforzado la seguridad sobre el juez Llarena, encargado de investigar en el Tribunal Supremo a los líderes independentistas a los que ese mes procesó por rebelión. Esa medida no evitó el ataque de esta semana en Sant Cugat, que ha llevado al Consejo General del Poder Judicial a reiterar la petición de amparo para su compañero.
Preguntado a este respecto, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, pidió esta semana en un desayuno informativo de Europa Press no generar “alarmismo”. "Nos debe preocupar a todos la crispación, pero no tenemos que generar alarmismo. Son dos sucesos puntuales (el de Sant Cugat y el del pasado marzo), no les quito la gravedad, pero no hagamos alarmismo de los mismos", declaró.