Los partidos "observadores" en el Pacto Antiterrorista, que desde que se creó en 2015 se han negado a suscribirlo, no han querido distinguirse del mensaje de unidad que han lanzado todas las formaciones políticas en el Ministerio del Interior, en la primera reunión de este foro tras los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona) del pasado jueves. Una vez concluida la cita, han mantenido su decisión de no incorporarse como firmantes, por unas razones que hoy han evitado explicar. Podemos y Compromís han asegurado que seguirán con su estatut, si bien PDCat y ERC han eludido la pregunta de si se sumarán en algún momento, porque creen que no es el momento de debates políticos.
Sin querer entrar en las diferencias políticas que justificaron su decisión, y que expresamente han renunciado a recordar, han decidido poner el acento este lunes en la unidad de los partidos y la firmeza contra el terrorismo, así como en el agradecimiento a todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Los portavoces de Podemos, Rafael Mayoral, y Em Comú Podem, han garantizado que serán "leales" al Gobierno en la lucha antiterrorista, han agradecido la invitación a la reunión y ha asegurado que seguirán asistiendo a estas convocatorias. Pero han defendido su decisión de hacerlo en calidad de "observadores" aludiendo al "pluralismo" político.
Y ha avisado de que ningún atentado les hará cambiar de opinión, porque eso sería "acabar con el pluralismo político", que es lo que quieren, ha continuado, los terroristas. No lo harán tampoco, ha dicho, aunque se dé más operatividad a este pacto y sirva, como ha pedido Ciudadanos, de foro para analizar otras medidas de prevención y lucha contra el terrorismo. El diputado de Podemos ha dicho que no contemplan que se les exija firmar algo que "decidieron hace dos años" otros partidos.
Como ha hecho después Domenech, ha insistido en que lo importante es la imagen de consenso que se ha ofrecido este lunes. Es más, el diputado de la rama catalana de Podemos ha elogiado las medidas que se han ido tomando tras los ataques en Barcelona y Cambrils y ha tildado de "ejemplar" la actuación de los servicios de emergencias y seguridad.
El mismo mensaje moderado es el que ha lanzado el portavoz de ERC, Joan Tardà. Dejando de lado sus habituales críticas al Gobierno de Mariano Rajoy, ha agradecido la invitación a este pacto, al que los partidos catalanes se incorporan por primera vez como observadores, y ha dejado clara su voluntad de "arrimar el hombro" para luchar contra el terrorismo.
"No toca hablar de las diferencias", ha respondido, cuando se le han preguntado por la razón por la que ahora sí han querido participar. Sus discrepancias, ha recalcado, ya las hicieron evidentes en 2015 y ahora quieren prevalecer "la solidaridad" frente a los terroristas. Por eso, ha insistido en que el asunto de la firma puede abrir "un debate que quizá distorsiona" la unidad que se ha visto hoy. "Ya llegará el momento", ha insistido.
De la misma manera, Carles Campuzano, desde el PDCat, ha insistido en que no es el momento de hablar de cuestiones de carácter político y no ha cerrado la puerta a que su estatutos cambie en un futuro. "En su momento lo valoraremos", ha respondido. Sin querer concretar más, ha destacado que han decidido participar en estas reuniones en las que se permite expresar una "unidad de fondo" y ha dicho que "en su momento" ya analizarán "más cuestiones".
Sí ha sido más contundente Joan Baldoví de Compromís, descartando una firma que les han pedido desde el Gobierno y desde el resto de formaciones políticas "Mantenemos las discrepancias y seguiremos sin firmar", ha dicho, defendiendo que seguirán como observadores, convencidos de que así podrán hacer aportaciones.
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