Entre los múltiples frentes abiertos que tiene el Gobierno de España se encuentra el reparto de 'menas' (menores no acompañados) a todas las zonas del país. Una política migratoria que ha puesto a las Comunidades Autónomas en un brete, provocando roces y discrepancias en los diferentes Ejecutivos regionales.
Buen ejemplo de estas disputas fueron las palabras de Santiago Abascal, líder de Vox, quien ayer lanzó un órdago al PP, señalando que, si cede en el reparto de 6.000 menas que están planeando el PSOE, "romperá sus acuerdos de gobierno autonómicos".
Así lo concretó Abascal en la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Acción Política, alegando que "no seremos cómplices de robos, violaciones y machetazos". Consideran que una cesión en este sentido rubricará una nueva "estafa" del Partido Popular a sus votantes.
El PP pide al Gobierno una política migratoria
Unas horas antes, el portavoz del Partido Popular, Borja Sémper, cargó las tintas contra la política migratoria que el Gobierno de Pedro Sánchez está llevando a cabo en las últimas semanas, a la cual calificó de “un desastre y es pancartera”, apuntando que “en ningún tema y en ninguna gestión compleja, la política tiene que ser detrás de una pancarta, mucho menos en materia migratoria”.
Siguiendo el hilo del asunto, Sémper ahondó en que desde el Ejecutivo central se afronta la política migratoria de “manera extraordinariamente frívola”, ya que “trata a los menores no acompañados como mercancía como paquetería exprés”.
“Estamos hablando de seres humanos. De seres humanos que huyen de tragedias y que huyen del hambre. Y cuando hablamos de menores, especialmente, tenemos que tener en cuenta componentes humanitarios”, aseveró Sémper en Almería.
“Ahora bien, no se les puede enviar como un paquete a cualquier punto de España en el que no hay capacidad ni para acogerlos, ni para darles las condiciones humanas suficientes, ni para que, hipotéticamente, una sobresaturación provoque problemas de orden público”, subrayó el popular.
Por ello, considera que el Gobierno debe explicar qué hace en los países de origen, por ejemplo en Mauritania, para evitar que las mafias que trafican con personas “hagan su agosto”. “Nos tiene que decir qué está haciendo también con la Unión Europea, qué gestión está haciendo el señor Albares en Europa para que Frontex actúe".
De igual modo, desde el Partido Popular creen que el Gobierno tiene que ofrecer “garantías” a las comunidades autónomas gobernadas por el PP y cuyos presidentes están “dispuestos a acoger” a dichos menores, para que sepan que “van a poder hacerlo”.
Feijóo apunta al abandono de las CCAA por el PSOE
Preguntado por este asunto en la rueda de prensa posterior a su visita al Parlament de Cataluña y al GGP liderado por Alejandro Fernández, Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP, cargó contra el Gobierno de Pedro Sánchez por no tener una política migratoria, amén de tener "abandonadas al diálogo" a las Comunidades Autónomas.
Respecto a las palabras de Abascal sobre romper los pactos de Gobierno allá donde los haya en el resto de autonomías y municipios, Feijóo concretó que las comunidades serán solidarias para acoger menores "siempre" que tengan capacidad.
El PSOE pide la intervención de Feijóo
Como siempre que suceden situaciones de este calibre en España, los diferentes actores implicados no pierden su oportunidad para meter presión a la otra parte. En este caso, fue el PSOE, quien a través de María Jesús Montero, vicepresidenta primera del Gobierno, solicitó al líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo que "imponga" a las comunidades autónomas gobernadas por su formación un reparto "equitativo" de menas que están llegando en las últimas semanas a las costas de Canarias.
"Déjense de excusas, practiquen la solidaridad y admitan que haya un reparto equitativo de estos menores", expuso ayer Montero en un acto sobre igualdad en la sede del PSOE.
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