El Partido Popular ha iniciado el curso político con una ofensiva contra las medidas fiscales y financieras defendidas por el Gobierno de Pedro Sánchez, ahora en funciones. Por un lado, los populares exigen la celebración de un debate en el Senado entre el Ministerio de Hacienda, dirigido por María Jesús Montero, y los gobiernos autonómicos. Quieren que la asfixia financiera que están denunciando muchos ejecutivos regionales se trate urgentemente en la Cámara Alta.
Si la tesis doctoral de Sánchez fue una de las grandes protagonistas del pasado curso político en el Senado, ahora que el PP no goza de la mayoría absoluta, el tema estrella parece ser la financiación autonómica. El presidente de la Cámara Alta, Manuel Cruz, ha convocado la Diputación Permanente a las doce de este martes para decidir si se celebra el debate. Todo dependerá del PSOE, que es quien dispone ahora de la mayoría.
El PP ha reclamado en el Congreso el "supuesto informe" de la Abogacía del Estado con el que Montero justifica que al estar en funciones no puede transferir a las CCAA más financiación
En paralelo, el PP ha reclamado en el Congreso el "supuesto informe" de la Abogacía del Estado con el que Montero justifica que al estar en funciones no puede transferir a las Comunidades Autónomas más financiación para compensar el agujero que les ha dejado en sus cuentas la ausencia de Presupuestos del Estado para 2019.
Fue la ministra quien apuntó que los gobiernos regionales tendrán que esperar a que se constituya un nuevo Ejecutivo y ahora es la portavoz popular en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, y el portavoz adjunto para asuntos económicos, Mario Garcés, quienes le exigen el documento de los servicios jurídicos del Estado que justificaría esa decisión.
La conducta del Gobierno de Sánchez supone, según Álvarez de Toledo, "un desistimiento irresponsable de sus obligaciones de dotar de recursos necesarios a las Comunidades Autónomas, abocando a estas a una situación insostenible". "La parálisis del Gobierno está provocando un enquistamiento alarmante en los presupuestos de las CCAA, que inevitablemente acabará trasladándose a los ciudadanos en cada territorio", advierten.
Rebajas vs subidas de impuestos
Además, el PP mantiene una guerra fiscal con el PSOE que ha saltado de los programas de ambos partidos a las comunidades autónomas. Mientras el PP aboga por rebajas impositivas o incluso por abolir impuestos como el de Donaciones y Sucesiones, el PSOE considera que no es necesario modificar la situación y en algunos casos, incluso plantean subir tributos para las rentas más altas.
Ejemplos de ello son algunos de los planes de los nuevos Gobiernos autonómicos conformados después del 26 de mayo en Madrid y La Rioja. El nuevo Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso dice que "no va a entrar en guerras" con otras autonomías sobre política fiscal, pero insiste en dejar claro que la región va a seguir bajando los impuestos y espera que se siga "esa senda" en otros lugares como ya ha avanzado Andalucía.
Un oasis fiscal que contrasta con La Rioja. El acuerdo de coalición entre PSOE y Podemos incluye recuperar el impuesto de Patrimonio de forma íntegra e incrementar el tipo del Impuesto sobre la Renta al 25% para rentas de más de 60.000 euros y al 27% a partir de 120.000 euros.
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