Política

Puigdemont humilla a ERC: "Elegir president no es Operación Triunfo"

Puigdemont quiere ser presidente a toda costa. Vía telemática o mediante nuevas elecciones. ERC discrepa de esta estrategia. El cónclave de JxCaT ha despreciado formalmente las exigencias de los republicanos

No hay más candidato a ‘president’ que el propio ‘expresident’. Carles Puigdemont ha reunido en Berlín a su grupo parlamentario para estudiar nuevamente las posibilidades de una investidura. Las cosas están muy claras. No hay ‘plan D’, es decir, no habrá un candidato ‘limpio’ para salir del actual bloque institucional.

Puigdemont, con la moral ‘por las nubes’, según fuentes del cónclave secesionista, no renuncia a ocupar el sillón de la Generalitat. En enero amagó con 'un paso al costado', pero en forma 'provisional'. Ahora ha vuelto, dispuesto a todo.

Le explicó este martes a su equipo que se mantienen en pie las candidaturas de Jordi Sánchez y Jordi Turull, que ya se intentaron anteriormente sin éxito. Presionar a la ONU, agitar la ‘internacionalización del conflicto’ y prepararse para elecciones anticipadas, son las tres líneas de acción de la plataforma del prófugo.

Estos planes son una bofetada más a las exigencias de ERC, que insiste en la necesidad de sacar adelante ‘cuanto antes’ una investidura sin problemas procesales, “para acabar con el 155”. Roger Torrent, presidente del Parlament, ha presionado en esta línea en su visita a Ginebra, donde fue recibido por una directiva de segunda línea del Comité de Derechos Humanos de la ONU. Protagonizó una rueda de prensa inaudita en medio de una calle, a la que asistieron tan sólo corresponsales de los medios del movimiento nacionalista. 

Los republicanos huyen de la posibilidad de concurrir de nuevo a las urnas. Tampoco quiere el PDeCat, la antigua Convergencia, cada vez más enfrentada a los planes de Puigdemont. Poco caso se les hace a unos y otros desde el sanedrín de Berlín.

“Elegir candidato a la presidencia no es una Operación Triunfo”, explicó Eduard Pujol, portavoz de JxCat, haciéndose eco de lo escuchado a su jefe en este encuentro. “Hay tiempo, no apuraremos los plazos pero nos hemos ganado el derecho a gestionar nuestros tiempo”, señaló en rueda de prensa. Y añadió: “La legitimidad del president es absoluta, hay que encontrar un mecanismo para llevar a la política lo que ha legitimado la calle”. La misma teoría que esgrimió Puigdemont en su entrevista-río de este domingo en TV3.

Investidura telemática

El TC ya se pronunció en contra de una investidura con el aspirante en ausencia. El grupo parlamentario de JxCat presiona a Torrent para modificar la ley de Presidencia al objeto de darle cobertura legal a esta intentona. Una iniciativa pendiente ahora del informe del Comité de Garantías Estatutarias. Puigdemont lo intentará, en contra del criterio de ERC, para provocar un nuevo choque con el Estado. En su entorno dan por hecho que el fallo del tribunal regional de Schleswig será favorable, prácticamente exculpatorio.

Superado este trance, no habrá más salida que las elecciones, en torno al 15 de julio. Es el escenario preferido por el expresidente, ya que considera que los partidos democráticos han perdido fuelle y el independentismo está más fuerte que nunca. No es lo que apuntan las encuestas. Pero cuenta con presentarse con una candidatura de unidad que agrupe a todas las formaciones separatistas, incluída ERC.

Un bloque posiblemente invencible, siempre según esas fuentes. El constitucionalismo no camina unido. El PSC sigue a su aire y las disputas entre Ciudadanos y el PP son frecuentes y crecientes. Las urnas esperan a Puigdemont, quien “está encantado” con los jueces alemanes, “con el ridículo del Estado” y con la posibilidad de convertirse de nuevo en presidente, según comentan en círculos republicanos.

 

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP