El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha celebrado que el PP "eche" de su grupo en el Senado a Pilar Barreiro, investigada por delitos de corrupción, para facilitar que la formación naranja apoye en el Congreso los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018.
"Más de 80 días ha tardado el PP en echar a su senadora imputada por el caso Púnica. Rajoy siempre tarde, pero si querían empezar a negociar los presupuestos tenían que cumplir el pacto anticorrupción exigido por Ciudadanos. Nosotros sí cumplimos", ha escrito en su cuenta de Twitter.
El pasado 15 de enero, Barreiro declaró en el Tribunal Supremo en calidad de investigada por delitos de fraude, malversación de caudales públicos, cohecho, prevaricación continuada y revelación de información reservada en el marco de la trama Púnica. La Sala de lo Penal había abierto causa contra ella el 17 de octubre.
Condición para votar a favor de los Presupuestos
Aunque la semana pasada la Fiscalía del Supremo pidió el sobreseimiento provisional de la causa contra la senadora y exalcaldesa de Cartagena, Ciudadanos siguió exigiendo al PP que la apartara del escaño. Esta ha sido siempre una de las condiciones de Cs para votar a favor de los PGE de 2018, sobre los cuales alcanzó un preacuerdo con el Gobierno el pasado septiembre.
El acuerdo de investidura que el PP y Cs firmaron en 2016 prevé "la separación inmediata de los cargos públicos que hayan sido imputados formalmente o encausados por delitos de corrupción, hasta la resolución definitiva del procedimiento judicial".
Sin embargo, el PP no podía obligar a Pilar Barreiro a renunciar al acta de senadora porque, según la doctrina del Tribunal Constitucional, los escaños pertenecen a los cargos electos, no a los partidos con los que se presentaron a las elecciones.
En 2016, la formación naranja también estuvo reclamando que la entonces senadora 'popular' Rita Barberá abandonase su escaño para respaldar la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Finalmente, en septiembre de ese año, la senadora comunicó que conservaba su escaño pero dejaba de ser militante del PP y se pasaba al Grupo Mixto porque así se lo había pedido la dirección del partido.
En el caso de Barreiro, ha solicitado la baja en el Grupo Popular con el objetivo de "no perjudicar al partido" al que siempre ha sido "leal", así como "por el interés general de los españoles", según ha explicado en un comunicado.
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