Pedro Sánchez ha abierto el Comité Federal de este sábado y lo ha hecho sin abordar el tema que mantiene al PSOE fragmentado: el cupo catalán. Pese a las duras palabras de Page a la entrada del acto, el presidente no ha hablado sobre las condiciones pactadas entre PSC y ERC para la investidura de Illa. El president, que ha estado presente en el comité, ha recibido la felicitación del líder socialista.
Además, para ofrecer un titular que desvíe la atención sobre una cuestión que mantiene vivos algunos incendios en el partido, ha anunciado que se presentará a la reelección como secretario general del PSOE en el Congreso General que se celebrará a finales de noviembre en Sevilla. "Tengo un proyecto de futuro para España y el único partido que lo puede hacer es el PSOE".
El presidente ha prometido avanzar en la creación de un estado federal, asegurando estar dispuesto a "reconocer singularidades, a permitir que todas las comunidades autónomas que lo deseen recauden y gestionen más gravámenes". Porque para Sánchez, el debate de la financiación económica "no es es entre territorios, sino entre modelos, entre quienes ven en los servicios públicos un derecho o una mercancía". Considera que se abre ahora "·una nueva etapa autonómica" que permita crear un "sistema más justo".
Ha arremetido contra el modelo de la derecha por negar "la emergencia climática, el liderazgo de las mujeres, los derechos de quienes ven la vida distinto a ellos" y les acusa de "infundir el miedo con supuestas okupaciones, migración y el gasto público" con el objetivo de derrumbar "el estado del bienestar" para convertirlo en "un negocio para unos pocos".
Para Sánchez, la polémica de la financiación autonómica surge como la "enésima excusa para ocultar su proyecto neoliberal" y ha presumido de haber transferido 300.000 millones de euros más a las comunidades que Mariano Rajoy. "Es un 32% más en el mismo lapso de tiempo". Además, el presidente ha acusado a los gobiernos del PP de regalar "el dinero de todos" a "los más ricos", a quienes hacen "regalos fiscales".
El presidente del Gobierno ha hablado sobre el último Comité Federal del partido, aquel en el que Sánchez no estuvo, ya que se celebró durante sus cinco días de reflexión. Ha agradecido los apoyos en aquel momento y ha apuntado que "el poder no solo se ejerce, a veces se sufre", ya que a veces "ser la pareja, el hermano, la madre o el compañero del presidente implica pagar un coste injusto" a través de "los bulos, las fake news y los ataques de algunos tabloides digitales".
Pese a las campanas de elecciones anticipadas por las continuas presiones de Junts, Sánchez ha augurado un periodo "sin elecciones a la vista" y que "hay gobierno para largo". Además, ha lanzado un ataque con Feijóo, a quien señala que no sabe "qué es mayor, si su frustración o su desesperación".
Elogios a Illa
Sánchez ha expresado su "orgullo" porque asegura que hasta hace no mucho en Cataluña la gente "hablaba de conflictos y de ruptura" y ahora hay un presidente de la Generalitat socialista que trabaja "por el entendimiento entre los catalanes y la unidad de los pueblos de España".
"Es un logro socialista y un logro tuyo y de los catalanes", le ha dicho Sánchez a Illa, así como ha dado la enhorabuena en su intervención inicial a Óscar López, nuevo ministro de Transformación Digital y de la Función Pública y presente también en el acto.
"Ya veréis mañana en los medios de comunicación de la derecha; ahora mismo lo que domina cierta conversación publicada es centrarse en los problemas y pasar de puntillas sobre las soluciones, que lo que parece que da audiencia o retuits es seguir a unos agonías y vaticinar tragedias que al final no acaban produciéndose de verdad", ha insistido.