La Ejecutiva Regional del PSOE-A ha dado este lunes la confianza para seguir liderando el partido a la secretaria general y presidenta en funciones de la Junta, Susana Díaz, que ha sostenido que, si hubiera perdido las elecciones, habría dimitido y ha situado su objetivo en impedir que el próximo gobierno dependa de Vox.
La dirigente socialista no ha aclarado cuáles serán su preferencias en torno a los posibles pactos poselectorales, pero ha dejado claro que "lo normal es que el tercero (por Ciudadanos) apoye al primero (por el PSOE) y que lo demás es "extraño".
Además, ha reiterado que se pondrá en contacto con todos los partidos constitucionalistas, pero no con Vox, con el objetivo de impedir que el próximo Gobierno de la Junta de Andalucía dependa de la "extrema derecha".
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación