El Estado paga más a los profesores interinos que cubren plazas provisionalmente en el interior del país que a los que trabajan en las mismas condiciones de temporalidad fuera de España. Cobra más un funcionario interino en Castilla-La Mancha que otro que da clases en un centro de París gestionado por el Ministerio de Educación español.
Según datos facilitados por los principales sindicatos de Enseñanza, los profesores de Primaria que imparten clases en centros, liceos, institutos y programas de la acción educativa española en el exterior (AEEE) cobran unos 1.300 euros al mes netos y los de Secundaria 1.500.
Da igual que uno esté en Marruecos o en los Países Bajos. "Cualquiera de los adolescentes a los que doy clase en Ámsterdam cobra más que nosotros gracias a algún trabajo part time en floristerías o pizzerías", reconoce un docente interino desde la capital holandesa.
En cambio, los funcionarios de carrera destinados en el extranjero sí cobran un complemento económico por vivir fuera. Este tipo de retribuciones están contempladas en el Real Decreto 6/1995, es decir, tienen derecho a percibir una cuantía económica para equiparar su sueldo al poder adquisitivo y a la calidad de vida del país donde van a trabajar.
Hasta 500 euros menos
Sin embargo, fuentes del profesorado interino denuncian que esta retribución no se aplica en su caso. De esta forma, se dan situaciones como la de que un profesor interino de Primaria en la ciudad bereber de Nador, situada a 15 kilómetros aproximadamente al sur de la ciudad española de Melilla, no tiene ningún complemento por estar fuera y tampoco cobra el complemento autonómico de 500 euros que sí ingresan otros que dan clase en un centro melillense. Ello, pese a que el pagador es el mismo: el Ministerio de Educación.
El profesor que la solicita una plaza fuera tiene que acreditar su residencia en el país destino en el momento en el que se le nombre como funcionario interino
Para cubrirse las espaldas, continúan, Educación fija entre los requisitos para cubrir una vacante en el exterior que el profesor que la solicite tenga acreditada su residencia en el país destino en el momento en el que se le nombre como funcionario interino.
"La gran mayoría presentan sus candidaturas desde España y lo hacen porque quieren ganar experiencia y puntos. Pero no viven allí. Al poner ese requisito, el Estado se 'ahorra' esos complementos para los interinos en el extranjero", cuenta Pedro Corral, secretario general de la Federación de Enseñanza de CCOO del Exterior.
Conviven mejor y peor pagados
No obstante, aclara que los funcionarios de carrera que no son interinos y que trabajan en algún centro o programa del Ministerio en el exterior sí tienen mejores condiciones que sus homólogos en España. "En estos casos los sueldos son muy variables, dependen del país destino, de las condiciones de seguridad o de los años de antigüedad, pero suelen cobrar más que los que trabajan el los centros educativos de las comunidades autónomas", señala.
La acción educativa del Gobierno en el exterior ha propiciado que fuera del país convivan los docentes españoles que más cobran con los que menos
Por ello, la acción educativa del Gobierno en el exterior ha propiciado que fuera del país convivan los docentes españoles que más cobran con los que más penurias pasan. "El colectivo de los interinos está maltratado, muchos se ven obligados a compartir habitación o a pedir ayuda a sus familias", insiste Corral.
Pedro Ballesteros es uno de estos interinos al que le cuesta llegar a fin de mes. Tiene 38 años y trabaja en un liceo de Holanda que depende de España. Antes estuvo en Tánger. "No es lo mismo buscar piso en Marruecos que en Holanda. Aquí los alquileres están por las nubes, así que con estos sueldos es muy difícil encontrar algo. No entienden cómo nos venimos fuera con estos salarios", cuenta.
Presupuesto 2019
Y reconoce que se ve obligado a dar clases particulares privadas para ir un poco más desahogado. Además de una mejora en los salarios, Ballesteros reivindica que su colectivo, el de los interinos en el exterior, tenga algún tipo de ayuda al año para poder venir a España de visita en algún momento. "Evidentemente a muchos no nos da para ahorrar y pagarnos viajes para ver a nuestras familias", dice.
Su situación contrasta con la de los consejeros, agregados y secretarios de Educación en el Exterior. "Este tipo de cargos son designados y suelen convertirse en los retiros dorados de ex cargos de distintas administraciones gubernamentales o autonómicas. Aunque no tienen nexos con la Enseñanza pasan a ser consejeros de Educación en otros países", denuncian desde la Federación de Enseñanza de CCOO. "Cobran mucho más que un consejero autonómico y trabajan bastante menos", comparan.
Según ha explicado esta semana en el Congreso de los Diputados el secretario de Educación y FP, Alejandro Tiana, el Ministerio destinará 106.391.300 millones de euros a sus centros y programas de Acción Educativa en el Exterior, donde trabajan casi 1.000 profesores españoles, además de otros docentes de programas de intercambio y 7.000 auxiliares de conversación. Esta red atiende regularmente a 180.000 estudiantes. "Es una cifra importante que debemos seguir cuidando y cultivando porque al fin y al cabo es la imagen que damos de nuestro sistema educativo en el exterior", opina Tiana.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación