"Se consuma la traición de Sánchez a los españoles". Así empezaba este viernes el argumentario interno distribuido por el Partido Popular a sus dirigentes nacionales en una semana marcada por las cartas y chats de militares retirados.
En dicho mensaje no había ninguna referencia a esta última polémica y el líder del PP, Pablo Casado, tildó de "intolerable" las aseveraciones que hicieron estos exmilitares, al tiempo que dijo que espera que, una vez que este asunto está en la Fiscalía, se abra un procedimiento para depurar responsabilidades.
Sin embargo, las palabras utilizadas en el argumentario interno del PP sugieren un endurecimiento del discurso del principal partido de la oposición contra el Gobierno. Por ejemplo, se califica como "la gran mentira de Sánchez" el que el jefe del Ejecutivo haya sacado adelante los Presupuestos, y de paso su permanencia en La Moncloa, con la mayoría de 188 apoyos cuando "dijo que no pactaría nunca con Bildu ni con los partidos independentistas".
"No ha habido negociación presupuestaria, ha sido una negociación política en la que el Gobierno ha cedido ante Bildu y ERC el acercamiento de presos a cárceles del País Vasco, la retirada del Ejército de esta comunidad, la permisividad con homenajes a etarras, la eliminación del castellano como lengua vehicular o la subida de impuestos en las comunidades con baja carga impositiva", resume el PP a sus dirigentes.
En Génova se remiten a las palabras del portavoz del ERC, Gabriel Rufián, cuando habló de la llegada de 'la nueva era', "advirtiendo lo que ya sabíamos y denunciamos: que esta va a ser la forma de gobernar de Sánchez durante la Legislatura".
Sobre las cuentas públicas para el próximo año, el PP subraya su pesimismo. "Son unos PGE que nos llevarán a todos por delante. (...) Nada tienen que ver con el eslogan de Sánchez de 'no dejaremos a nadie atrás'. Estos presupuestos significan más impuestos, más gasto, más déficit, más deuda pública y más paro para los españoles".
A juicio del PP, lejos de que solucionar sus problemas, los PGE de Sánchez los "agravará" en 2021. "Lejos de sacarnos cuanto antes de la crisis, nos mantendrá en ella demasiado tiempo. No son las cuentas que necesitan España, son las cuentas que querían los socios radicales del Partido Sanchista", asevera Génova.
"Empeñados en romper España"
En este sentido, los populares plantean una "oposición leal y útil" para que los "dramáticos" datos económicos que, en su opinión, hay en la actualidad "vayan mejorando" a pesar de que el Gobierno "no haya querido pactar con nosotros ninguna de nuestras propuestas".
"Actuaremos allí donde gobernamos", refiriéndose a comunidades autónomas y municipios, "como dique de contención frente a las pretensiones de los socios de Sánchez, empeñados en romper España y en modificar nuestro sistema constitucional por la puerta de atrás".
Asimismo, el PP hace hincapié en el "fracaso" en la aplicación del ingreso mínimo vital (IMV) entre los españoles que más lo necesitan. "El Gobierno pronosticó que el IMV llegaría a 850.000 familias y a fecha de hoy sólo se han aprobado 160.000 solicitudes".
Los independentistas siempre han querido utilizar las lenguas cooficiales no como una manifestación de nuestra riqueza cultural, sino como un elemento de confrontación", advierte el PP
La formación de Casado apoyó en junio en el Parlamento, en víspera de la conclusión del primer estado de alarma, esta prestación para poder "paliar" los efectos de la crisis en las familias "más vulnerables" por la crisis del coronavirus.
"Vemos con preocupación y decepción el Ministerio de Seguridad Social", de José Luis Escrivá, "no haya sido capaz de eliminar las trabas burocráticas que impiden el acceso a las familias que más lo necesitan. Casi cinco meses después de su aprobación, no aceptamos las excusas del ministro y exigimos que el Gobierno dé respuesta a las necesidades de los más vulnerables", se subraya en el mensaje.
El PP presentó una proposición no de ley para que el Gobierno permitiera a las CCAA que lo solicitasen la tramitación y gestión del IMV, pero no salió adelante en el Congreso. "Si ellos no saben hacerlo, las autonomías han demostrado que sí, porque así lo hacen con otras prestaciones", puntualizan en Génova.
"Se ha sacrificado el español"
En último lugar, el partido de Casado hace una encendida defensa del castellano, un idioma que integra a cerca de 600 millones de personas, de las que 485 millones la tienen como lengua materna. "Defendemos el derecho de todos los españoles a utilizar el español y el deber de conocerlo, como recoge nuestra Constitución", reitera Génova.
El líder del PP mantuvo esta semana un encuentro con el director de la RAE, Santiago Muñoz, al que insistió en la defensa del español como lengua vehicular. "Esta reunión se ha producido cuando el Gobierno ha aprobado los PGE, en los que se ha sacrificado el español tras el pacto de Sánchez con ERC y el mismo día en el que Podemos, socio de Gobierno, firma con los nacionalistas una iniciativa plagada de erratas que exige al Ejecutivo poner fin a la 'imposición legal' del español", se quejan los populares.
Al hilo de ello, la formación de Casado advierte de que lo que sería una imposición es "la utilización en todo el país" de lenguas que sólo son oficiales en algunas CCAA", caso del catalán, gallego y euskera, "y no en el territorio nacional".
"Los independentistas siempre han querido utilizar las lenguas cooficiales no como una manifestación de nuestra riqueza cultural, sino como un elemento de confrontación. No vamos a permitir que se intente arrinconar el español y que se intente crear un conflicto político entre lenguas que no existe", se concluye en el argumentario del PP.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación