La salida de Iván Espinosa de los Monteros supuso una sorpresa para la gran mayoría del PP, pero no para algunos dirigentes populares que conocían los "motivos personales" por los que abandona la política. La decisión del exportavoz de Vox deja un regusto amargo a los de Feijóo, que temen un "giro ultra" de sus socios de gobierno en diferentes comunidades autónomas que ponga en juego esos pactos regionales y la negociación de los puestos de la Mesa en el Congreso de los Diputados.
Así lo afirman altos cargos del PP consultados por Vozpópuli, que reconocen el "alivio" que supone tener atado ya el apoyo de Vox a la investidura de Alberto Núñez Feijóo sin exigir entrar en el gobierno. De no existir ya ese compromiso por parte de Santiago Abascal, "todo podría pasar" tras la marcha de Espinosa de los Monteros y "la victoria del ala más dura de Vox".
Esa facción la encabeza, en opinión de los dirigentes populares contactados, Jorge Buxadé. El vicepresidente de Acción Política de Vox ha sido toda una piedra en el camino para el PP en las negociaciones para alcanzar los gobiernos autonómicos de Extremadura y Aragón y también un impedimento clave para que López Miras sea investido en Murcia. Por ese motivo, desde Génova, y una vez confirmada la reunión entre Feijóo y Abascal, apretaron para que el interlocutor en las negociaciones con Vox para la investidura de Feijóo fuera Espinosa de los Monteros y no Buxadé.
"El giro ultra" de Vox
Una vez logrado el 'sí' de los de Abascal, y ya con Espinosa fuera de la política, desde el PP ya se preparan para un "giro ultra" de Vox que dificulte las relaciones futuras con el socio de investidura y de diferentes gobiernos autonómicos. Las fuentes consultadas consideran que el nuevo equilibrio de fuerzas en Vox, con los ejecutivos regionales recién formados, y la negociación de la composición de la Mesa del Congreso aún pendiente, "puede complicar las cosas".
Con Espinosa de los Monteros, recuerdan desde el PP, "se podía hablar y llegar a acuerdos", pero Buxadé "siempre quema puentes". Una forma de actuar que se está imponiendo en Vox y que, en opinión de los populares, puede provocar más salidas en el partido de Abascal.
Él podía intuir que su futuro en Vox se complicaba por la mayor influencia de Buxadé sobre Abascal
En este sentido, dirigentes del PP que conocían los "motivos personales" señalados por Espinosa de los Monteros para justificar su marcha de la política explican que "evidentemente los tiene y han pensado en su decisión", pero añaden: "Él podía intuir que su futuro en Vox se complicaba por la mayor influencia de Buxadé sobre Abascal".
Caída de Vox si hay nuevas elecciones
Los cargos populares consultados, eso sí, admiten que la marcha de Espinosa también tiene consecuencias positivas para el PP desde el punto de vista electoral: "Está claro que Vox está pasando un momento más que delicado y que, de volver a tener que ir a las urnas, la caída en votos y en escaños, que además recibiríamos nosotros, sería considerable".
Ese escenario, de hecho, ya se barajaba en el PP antes del anuncio de Espinosa de los Monteros e, incluso, en Génova se relacionaba el anuncio del 'sí gratis' de Vox a Feijóo con esa amenaza de repetición electoral: "Ellos no quieren quedar como culpables de esa vuelta a las urnas para tratar de frenar la hemorragia de votos".
Ahora, esa caída electoral de Vox de tener que repetirse las generales "será más pronunciada", pronostican desde el PP. Las mismas fuentes, de hecho, advierten que una nueva cita con las urnas supondría, de facto, la vuelta del bipartidismo, ya que Sumar también perdería votos y escaños. En todo caso, insisten los populares, "nuestro objetivo está en alcanzar la investidura y estamos a 4 votos de conseguirlo".
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