Los cantos de sirena del Lexit –el sueño leonesista de desgajar León, Zamora y Salamanca de Castilla y León para formar una decimoctava comunidad autónoma en España– han vuelto. La Diputación de León votó este miércoles a favor de una moción para impulsar su creación. Una propuesta promovida por los tres diputados provinciales de Unión del Pueblo Leonés (UPL) y apoyada por los 12 del PSOE, a quienes Ferraz dio libertad de voto, y que insta a las Cortes de Castilla y León, al Congreso y al Senado a iniciar los trámites para favorecer su instauración.
Los 12 representantes de PP y Vox votaron en contra de dicha moción, pero no porque estén en contra y les vaya la vida en preservar la actual Castilla y León. "Casi todos los leoneses votaríamos a favor de una autonomía separada de Castilla si nos ponen delante una urna", se sincera en conversación con Vozpópuli uno de ellos. Si bien el más claro de todos fue David Fernández Blanco, portavoz popular en la Diputación de León y alcalde de Valverde de la Virgen desde 2003. Un histórico del leonesismo cuyo primer mandato como regidor fue bajo las siglas de UPL.
"David, leonesista desde hace 45 años, le habló de leonesista a leonesista a un tío que lleva cuatro años en UPL, tras haber abandonado el PSOE, y lo dejó sin argumentos", considera la fuente sobre lo sucedido en el pleno de la institución provincial. Un discurso cuyos ecos han resonado por todo el país. Más aún, tras la entrevista dada a El Mundo –"lo cogieron en caliente"–, justo al finalizar el pleno. "La mayoría de leoneses creemos que León merece una autonomía", dijo tras abandonar la sala "muy satisfecho" con su discurso. "Si el 80% de los ciudadanos de un territorio dicen que quieren independencia, ningún partido va a estar en contra", subrayó.
Por su parte, el PP de Castilla y León liderado por el también presidente autonómico Alfonso Fernández Mañueco no dio instrucciones a sus 11 diputados provinciales; que, aún así, votaron en contra de la moción. No obstante, la postura de la dirección de los populares castellano y leoneses es "clara, contundente y unánime". Nada de Lexit. Algo que ha generado revuelo en el seno de la formación. "Hemos recibido muchas llamadas", dicen fuentes populares de la Diputación de León.
La vía de Cantabria
El PP presentó una moción alternativa en la que llamaron a un "leonesismo útil" y en la que instaba a las administraciones a incrementar sus inversiones en la provincia. David Fernández se mostró muy crítico con UPL y PSOE por "jugar" con los sentimientos de los leoneses y basó su discurso en cómo enarbolan la bandera leonesa por puro tacticismo electoral.
David Fernández pidió al equipo de Gobierno que fuera "valiente" y que solicitara informes a expertos en Derecho Constitucional para que la propia Diputación de León inicie "los trámites constitucionales" para "solicitar la autonomía" del mismo modo que lo hizo Cantabria. El camino que emprendió Miguel Ángel Revilla a lomos del Partido Regionalista de Cantabria. El diputado popular provincial, además, dejó claro que en caso de iniciar el proceso, sólo debería incluir a León porque "la Diputación de León no puede decidir por Zamora y por Salamanca".
No obstante, la reivindicación de una región con esas tres provincias –que puede llegar a ser un quebradero de cabeza tanto para el PP como el PSOE– y con estatuto de autonomía se inició en la Segunda República. La Guerra Civil lo truncó. Tras la dictadura, las tres provincias fueron incluidas en Castilla La Vieja, formando la Castilla y León actual tras aprobarse en 1983 su estatuto de autonomía.