La Policía ha situado en la madrileña Puerta del Sol uno de sus cuarteles generales para coordinar el dispositivo dispuesto para la proclamación de Felipe VI como rey. Varias decenas de vehículos se agolpan en la plaza para atender cualquier incidente que surja en las inmediaciones. Pero entre la Policía Nacional también hay agentes que hoy no visten uniforme. Se trata de inspectores vestidos de calle y entre ellos hay también algunos con aspecto visiblemente desaliñado que sorprenden, incluso, a los miembros de las Fuerzas de Seguridad que se ocupan de controlar las principales calles del centro de Madrid.
"Hola, ¿Está usted de servicio?", le pregunta un policia uniformado a un joven con aspecto de 'perroflauta' que le enseña su placa: greñas hasta la espalda, mal aseado, vaqueros rotos, zapatillas deportivas gastadas.... "Sí, claro, responde". "¡Pues adelante!". Y el agente se mezcla entre el público que ha acudido a la zona de la Carrera de San Jerónimo con la intención de ver pasar a Felipe VI camino del Congreso antes de su proclamación como rey.
Para poder acceder al interior del Congreso hay que pasar por cuatro filtros policiales, a los que se añade uno más en el interior del viejo Palacio. "Aquí hay de todo, policías uniformados, de paisano, 'perro flautas', servicios de información...Hay que prevenir no solo posibles atentados sino también que personas con apariencia normal y menos normal puedan dar algún susto. Eso explica que haya inspectores con una indumentaria poco habitual", explica un alto funcionario que participa en uno de los servicios de vigilancia.