El PSOE de Andalucía necesita dinero. El partido debe devolver los microcréditos de la campaña electoral de las elecciones del pasado 19 de junio. Y lo tiene que hacer con un interés anual del 2,5% sobre cada uno de ellos. Cada mes que pasa sin que el partido remita el dinero, la dirección socialista en Sevilla deberá ingresar más en las cuentas de quienes hayan decidido colaborar con ellos. Fuentes socialistas consultadas por este diario, además, aseguran que habitualmente el lapso de devolución oscila entre el año y el año medio. Preguntado por este diario, el PSOE-A no precisa cuánto recaudó en microcréditos.
Lo cierto es que la tesorería del PSOE andaluz está mermada. Tras décadas como fuerza hegemónica al Sur de Despeñaperros, los 30 escaños que logró en las elecciones autonómicas -tres por debajo del suelo de Susana Díaz- le harán ingresar menos dinero. Por eso, "con el fin de reajustar la financiación del partido", el PSOE ha remitido una carta a los secretarios generales locales en la que les advierte de que "se hace necesario establecer un marco de colaboración entre la estructura regional y las agrupaciones locales y de distrito".
El partido se exculpa de antemano y dice que ha hecho un estudio de la situación económica general de cada una de las agrupaciones. "Entendiendo las diferentes situaciones y circunstancias, se han establecido unos criterios de aportación lo más equitativos y equilibrados posible, en función de la liquidez de las mismas a fecha de 31 de diciembre de 2021", zanja. A las que tienen más de 10.000 euros les piden el 15% del saldo en cuenta, a las que tienen entre 7.500 y 10.000, el 10%; a las que disponen de entre 5.000 y 7.500, el 7,5%.
Irritación
Este movimiento ha causado irritación en algunos socialistas. "El PSOE pagando la campaña autonómica con dinero municipal y, además, limitando seriamente las posibilidades electorales en pueblos y ciudades, porque 1.500 euros es lo que puede invertir un pueblo de 20.000 habitantes, por ejemplo, en anuncios en Facebook e Instagram", lamenta una fuente consultada por este diario. Y ese es el quid de la cuestión: la campaña clave de las elecciones municipales y autonómicas, en las que los socialistas se juegan gran parte de su objetivo de mantenerse en Moncloa.
El partido, no obstante, y ante las quejas por lo sorpresivo del hachazo en algunos cuadros de socialistas salió este jueves al paso: "No comprendo el revuelo. El PSOE se financia de manera multidireccional. Después de los procesos de elecciones hace falta echar una mano y se ha planteado una derrama. El PSOE se ha financiado siempre de manera legal y de manera transparente. Esto es algo normal y que se viene haciendo en la historia de nuestro partido", zanjó Juan Antonio Lorenzo, secretario general del PSOE de Almería y parlamentario en la Cámara autonómica de Sevilla.
Y eso que como ya contó este diario a primeros de enero, el PSOE debe 19,5 millones de euros a los bancos. Entonces, la dirección del partido pidió a las Federaciones que, en la medida de los posible, no adquirieran más endeudamiento. Sánchez apremió a los suyos a devolver los 4,1 millones de microcréditos que aún mantienen con particulares.
Cuentas justas
El partido saca pecho por la "sostenibilidad y equilibrio financiero de sus cuentas". "Los gastos netos no superarán a los ingresos netos", se vanaglorian. Y es que el PSOE-A, en 2021 tuvo unos ingresos de 68.582.719€ y unos gastos de 64.294.268€. Los socialistas, además, inciden en que "con carácter general, no se concertarán operaciones de endeudamiento". Y deben destinar sus recursos a la amortización de deuda.
"La amortización anticipada de la deuda se ha vuelto una necesidad en aquellas operaciones en las que el coste de las mismas sea superior al 3% y para ello deberá destinarse, al menos, el 25% del excedente económico. Estas operaciones, en su caso, deben llevarse a cabo en el último trimestre del ejercicio para asegurar que los excedentes que se disponen no son temporales", explica el PSOE en sus cuentas.
Andalucía es el origen de los últimos males que aquejan a socialistas. El batacazo en las urnas agitó las aguas de Ferraz, que han terminado depurando a la ya exvicesecretaria general Adriana Lastra y a los principales rostros de comunicación del partido, los exportavoces Felipe Sicila y Héctor Gómez. Sánchez ha dibujado un PSOE sin oposición interna totalmente integrado en la estructura de Moncloa. Sus tres hombres fuertes, Óscar López, Antonio Hernando y el recién recuperado Paco Salazar son el triunvirato con el que el presidente se ha encerrado a resisifir en el Palacio de Invierno de Moncloa.
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