No habrá una revuelta en el PSOE. Ni siquiera un gran debate interno, ni mucho menos se van a airear diferencias en público. La mayoría del partido apoya al Gobierno de Pedro Sánchez en lo que parece un camino inevitable hacia los indultos de los líderes del proceso separatista catalán encarcelados. Los motivos de este cierre de filas con Sánchez son variados, según ha sabido Vozpópuli de fuentes del partido.
Por un lado, el presidente ha silenciado cualquier voz discrepante desde su regreso a la secretaría general. Por otro, amplios sectores del PSOE están convencidos de que el indulto es la única forma de avanzar hacia una solución al conflicto territorial abierto en Cataluña.
"Lo normal es que hable (Emiliano García) Page y poco más", admiten fuentes socialistas. "No habrá debate público, entre otras cosas porque en el PSOE de Sánchez cualquier crítica, por muy constructiva que sea, se interpreta como una deslealtad".
El Supremo, contra los indultos
El Gobierno no se ha inmutado ante el demoledor informe del Tribunal Supremo en contra de los indultos. Sánchez ha fijado su posición, dicen en La Moncloa. Y esa posición es favorable al perdón a los dirigentes del independentismo catalán condenados por el golpe separatista de octubre del 2017. El jefe del Ejecutivo señaló que no recurrirá a la "venganza o la revancha".
El PSOE ha cerrado filas con su secretario general. Los principales cuadros del partido defienden los posibles indultos. Y todos coinciden en que el peaje es obligatorio si Sánchez quiere aguantar la legislatura. Los grupos nacionalistas y separatistas que sostienen a la coalición PSOE-Unidas Podemos han hecho de esta medida una línea roja. No se esperan discrepancias, más allá de Page.
La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha ha dicho que Page "hablará claro" para defender a España como "democracia plena". Fuentes de su entorno aseguran que se pronunciará este jueves. Page se encontraba estos días de viaje en Lisboa, donde ha promocionado el Festival de Almagro.
Otro de los críticos habituales con las medidas de gracia al separatismo es Javier Lambán. Pero el presidente de Aragón se encuentra convaleciente tras ser operado del cáncer de colón que padece. Lambán estará fuera de juego unas cuantas semanas, pero tiene a su disposición las redes sociales. El presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha sugerido que algo hay que hacer con Cataluña, aunque se oponga a los indultos.
Indulto para avanzar en Cataluña
Nada más se espera en el seno del PSOE. Cualquier debate, desde el más complejo al más simple, que cuestione una decisión de la cúpula se interpreta como "munición contra el adversario" desde que Sánchez recuperó la secretaría general en 2017, lamentan fuentes internas. Por eso, los grupos internos del partido apenas abordan la cuestión. Y de puertas para fuera se defienden las intenciones de Sánchez. Se defendieron cuando el presidente del Gobierno dijo en campaña electoral que no habría indultos; y se defienden ahora cuando ha cambiado de opinión y todo indica que los habrá.
Además, y en la línea de Fernández Vara, buena parte del socialismo actual cree verdaderamente que el indulto es indispensable para avanzar en la resolución del conflicto territorial abierto en Cataluña. Hay voces que lamentan "los tiempos" elegidos por el presidente. Sugieren que podría haber esperado un poco más. Y también hay quienes comentan sotto voce que el gran problema de la operación es "la falta de arrepentimiento y propósito de enmienda" de los condenados". "Es un poco contradictorio conceder un perdón cuando estas personas siguen diciendo que lo volverán a hacer", dicen estas fuentes.
El impacto de los indultos en las primarias del PSOE andaluz tampoco se considera excesivamente relevante, según explican desde el partido a este diario. Lo que se dirime en Andalucía es en clave interna, dicen. Y la batalla entre Susana Díaz y Juan Espadas probablemente no se traduzca en un debate sobre indultos sí; indultos no.