El PSOE y ERC han llegado a un acuerdo de cara a la futura ley de amnistía. Según anuncian los socialistas en un comunicado, tras una conversación telefónica este martes entre el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el president de la Generalitat, Pere Aragonès, ambos líderes han ultimado los detalles de la polémica norma. Con el acuerdo definitivo con Esquerra en ciernes, a Ferraz sólo le falta concretar el apoyo de Junts para garantizar la investidura del socialista.
"Ambas formaciones consideran colmadas sus expectativas y satisfechos sus principios políticos", establecen en el comunicado. De esta forma, anuncian, la ley se registrará "próximamente" en el Congreso de los Diputados. A pesar del anuncio, el comunicado da a entender que las conversaciones siguen en marcha ya que será cuando estas finalicen, según explican, cuando se comunique la fecha y lugar de firma del acuerdo.
En este sentido, ambas formaciones "han delegado en sus respectivos equipos negociadores el cierre definitivo", que se producirá en las próximas horas. ç
La conversación entre Sánchez y Aragonès, de unos quince minutos, ha servido para sellar el acuerdo, después de que el presidente de la Generalitat lanzara la semana pasada una señal de alarma por el curso de las negociaciones: "No vamos bien", advirtió.
El acuerdo entre PSOE y ERC para la ley de amnistía
Los partidos, por el momento, solo han aportado información 'superficial' sobre el contenido del acuerdo: contendrá "cuestiones políticas y económicas para desarrollar durante la XV Legislatura".
Esta misma tarde la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, reclamaba "coordinación" en el eje independentista encarnado por ERC y Junts en materia de las negociaciones de cara a la amnistía. Entonces, Plaja ha defendido que sobre la mesa se reclamara que la ley resuelva "todos los casos de los represaliados", así como incluir "a todos los represaliados políticos", incluida la cuestión de Tsunami Democràtic, los cuales sospechan que podrían quedar fuera del paraguas de la nueva ley.
Cuando aún están por conocer qué concesiones hará Ferraz a Esquerra, las demandas del partido independentista de los últimos días cobran especial relevancia. El pasado jueves, La Vanguardia adelantó que las negociaciones daban un paso atrás ante el desacuerdo entre PSOE y ERC sobre si definir el 1-O como un delito o no en la medida.
Por otro lado, más allá de la amnistía, socialistas y republicanos avanzan también en la negociación de otras carpetas abiertas, como por ejemplo el traspaso de competencias y recursos del Ingreso Mínimo Vital, un compromiso pendiente de la legislatura pasada y que ahora se está acabando de ultimar, a falta de cerrar detalles técnicos, según fuentes conocedoras de la negociación.
Críticas al anuncio del acuerdo de amnistía: de noche y tras la jura de la Constitución de la princesa Leonor
La llegada del acuerdo, a última hora de la noche y tras una jornada que ha ocupado a toda la clase política, la jura de la Constitución de la princesa Leonor, no ha tardado en despertar críticas. Entre ellas, la de la secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra. La política ha tildado de que el anuncio ha llegado "con nocturnidad y alevosía".
"Los mismos que cometieron el delito están redactando el borrón y cuenta nueva", ha criticado Gamarra ante la expresión utilizada en el comunicado, por la que PSOE y ERC han dicho considerar "colmadas sus expectativas" sobre la amnistía.
"Una rendición"
Además de la secretaria general 'popular', desde el propio PP apuntan que este pacto alcanzado por PP y ERC no se trata de un acuerdo "sino de una rendición". La formación que lidera Núñez Feijóo va más allá y señala que la comunicación de este es más propio "del Día de los Santos Inocentes".
"Es una broma que Sánchez fíe su estrategia para minimizar su desgaste por esta deshonra a que los españoles no se den cuenta de lo que está haciendo", puntualizan para luego sentenciar que Sánchez esta sometido a España una "humillación" a la que Alberto Núñez Feijóo se "enfrentará".
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