“Sé que habéis hecho muchos esfuerzos, pero os pido que estéis preparados para cualquier eventualidad y para asumir los costes políticos y personales de la decisión que tomemos con el acuerdo con el PSOE”. Con esta frase, Carles Puigdemont deja en el aire su apoyo a Pedro Sánchez y da a entender que podría dejar caer al Gobierno dentro de poco. "No somos rehenes de nadie", ha señalado por video conferencia durante el Consejo Nacional de Junts.
La advertencia llega tras la reunión de urgencia celebrada entre el PSOE y Junts en Suiza, en el que participó Santos Cerdán en representación de los socialistas. En ella, se pidieron explicaciones a Puigdemont después de que los independentistas presentaran una Proposición No de Ley en la Cámara baja que pide que Sánchez se someta a una cuestión de confianza. El líder catalán cree que un año de espera "es suficiente" para ver si hay voluntad política y ha insistido en sus dos condiciones para mantener la relación: la aplicación de la ley de amnistía y el traspaso de forma integral de inmigración.
"Los presupuestos no van a contar con nuestro voto a favor; los anteriores y los anteriores no han contado con nuestro voto a favor" ha señalado, dado que estos "continuan incumpliendo sistemáticamente" lo pactado con Cataluña. Ha calificado a Pedro Sánchez como "un incumplidor persistente" y ha recordado que ya avisó sobre él, con quién "todas las precauciones son pocas".
Ha continuado diciendo que Junts quería "ver un cambio de actitud que no se ha producido y por tanto, hay que decir que así no podemos continuar", lo que pone en el alambre el Gobierno de Pedro Sánchez. Para Puigdemont, el primer año de legsilatura no tiene un balance bueno. "Si es para el mantenimiento de las políticas que se han hecho hasta ahora, no estaremos", ha insistido en su mensaje, retransmitido a través de una pantalla en Vila-Seca, lugar donde se ha celebrado el acto.
Si
Junts acapara el foco con la cuestión de confianza
Junts ha conseguido acaparar el foco político en los últimos compases del año con su petición al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que se someta a una cuestión de confianza, sus exigencias para negociar los presupuestos y las reclamaciones sobre lo que se debe a Cataluña por parte del Estado.
Aunque desde el inicio de la legislatura la formación que lidera Carles Puigdemont se ha encargado en repetidas ocasiones de poner en apuros al Gobierno, dejando claro lo que se cotizan en el Congreso sus siete diputados, la ofensiva de los últimos días ha vuelto a poner encima de la mesa las "carpetas" pendientes y, de paso, todas las miradas sobre la formación.
A estas carpetas suele referirse la portavoz parlamentaria de JxCat, Miriam Nogueras, que la pasada semana encajó una tanda de reveses encadenados al Ejecutivo, aliándose con los populares para eliminar un impuesto energético, alejando la posibilidad de que haya presupuestos y lanzando una andanada a Sánchez en el pleno del Congreso.
ibarrabr
14/12/2024 15:28
Es la segunda vez que Junts vende helado a su rebaño a costa de un gobierno nacional. El 17 engañó a su rebaño creyéndose más listos que las instituciones de nacionales y en el 24 ha comprado el helado que les vendió Sánchez haciéndolo Jefe de las instituciones de España