El cabeza de lista de Junts+ a las elecciones catalanas, Carles Puigdemont, se ha erigido este sábado como el único candidato capaz de "plantarse" ante el Estado en defensa de los intereses de los catalanes. Así lo ha dicho en un acto celebrado en Elna (Francia), muy cerca de Perpiñán y de Vallespir, la localidad francesa fronteriza con España en la que el expresident se ha asentado para poder dirigir la campaña sin pisar territorio nacional, ya que sería detenido.
Al mitin, realizado en las antiguas escuelas de la pequeña localidad francesa, han asistido más de 2.000 personas, donde ha presentado públicamente su candidatura a las elecciones del 12 de mayo acompañado por el resto de miembros de las listas. En él se ha reivindicado "una Cataluña libre" y un referéndum de independencia tras haber logrado la amnistía. También han celebrado el posible regreso de Puigdemont a España tras los acuerdos con el PSOE.
Según Puigdemont, ninguno de los otros candidatos puede decir lo mismo, y cree que los catalanes, también los no independentistas, preferirán tener un presidente que pueda "plantarse" ante un gobierno que no cumpla con ellos.
El expresident ha vuelto a desenterrar el hacha de guerra con ERC y ha criticado a la formación por "desaprovechar" la mayoría independentista que ha habido en el Parlament durante la última legislatura. Ha reivindicado a su partido como "responsable" para "culminar" el proceso de independencia. Ha defendido la ruptura de gobierno que protagonizó hace meses porque el ejecutivo "no cumplía con los acuerdos y rechazaba todas las propuestas".
"El objetivo de Junts no es el poder por el poder, el cargo por el cargo, el poder nos interesa para transformar, para aprovechar oportunidades e impulsar el país sobre todo cuando hay tantas cosas por hacer", ha remarcado Puigdemont.
Illa pide prudencia pese a que las encuestas le respaldan
Frente a él se sitúa Salvador Illa, quien parte como favorito en las encuestas aunque con la necesidad de pactar para llegar al Govern. "Es verdad que el olor del perfume de las encuestas nos gusta, pero mucho respeto y mucha prudencia", ha añadido el candidato socialista, que a su vez ha afirmado que desde el PSC se tomarán estas cinco semanas muy en serio, trabajando con humildad y rigor.
Ha señalado que la década pasada ha sido tiempo perdido tras los gobiernos de Junts y ERC. De ahí que quiera gobernar para "abrir una nueva etapa en Cataluña que ya se está abriendo, pasar página y mirar hacia delante con cooperación y colaboración con los ayuntamientos".
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