La Policía Nacional cuenta con vigilancias y conversaciones de WhatsApp de Rafael Amargo que presuntamente demuestran que el artista se dedicaba a la distribución de sustancias estupefacientes desde su piso en Malasaña. Los mensajes, a los que ha tenido acceso Vozpópuli, revelan que el bailarín mantenía chats con mensajes crípticos: "No tardes que está esto aquí y el chaval se quiere llevar su dinero".
La investigación ha sido desarrollada por la Comisaría de Centro de la Policía Nacional que han obtenido las conversaciones de Rafael Amargo con uno de sus clientes que fue detenido pero quedó en libertad. Las fechas de estos mensajes fueron el 3 de octubre de 2022. "Nico, querido ya tienes esto aquí, ¿Cómo vas?", preguntaba el artista a lo que su interlocutor le envió la ubicación en tiempo real. "No tardes que está esto ya aquí y el chaval se quiere llevar su dinero", respondió Rafael Amargo.
En las conversaciones se comprueba como Amargo concretaba la hora con sus clientes: "Pa las 17.00 horas te los tengo aquí". "Estoy en el gym. Lo que salga de aquí me paso por casa por el dinero y me voy a verte", asegura su amigo.
"Aquí tendrás eso esperándote", afirmaba Rafael Amargo a lo que su interlocutor señalaba: "Conseguiste el poper o quieres que te lleve uno", "Si, si ya lo conseguí", respondía el bailarín. Los agentes consiguieron interceptar a varios de estos clientes cuando salían corriendo del piso en Malasaña.
Rafael Amargo, distribuidor de drogas
A raíz de los expuesto, los investigadores determinan que en el domicilio en el número 22 de la calle Espíritu Santo, en el céntrico barrio de Malasaña, se estaba llevando a cabo el tráfico de sustancias estupefacientes. Según los agentes, Rafael Amargo estaba llevando personalmente la distribución de las mismas que, para realizar al menos partes de estas ventas, actuaba de intermediario.
Los agentes creen que cuando su interlocutor le pide 4: significa una venta de tres gramos de Metanfetamina y uno de Mefredona que Amargo consiguió solicitándosela a su distribuidor, entregándosela en mano al comprador a cambio de 200 euros. Por la conversación y por el resultado de la vigilancia se pudo inferir que el proveedor sería alguna o las dos personas que accedieron a la vivienda del artista.
Rafa, el del teatro
Entre las personas investigadas, Amargo era conocido como un tal "Rafa", que trabajaba en el teatro. Uno de los investigados entregó a la Policía Nacional una fotografía y las conversaciones con el artista. Con todas estas pruebas encima de la mesa, la Policía Nacional detuvo de nuevo la noche del jueves en Alicante al bailaor Rafael Amargo acusado, junto a otra persona, de traficar con drogas supuestamente desde un piso del madrileño barrio de Malasaña y otros inmuebles de uso turístico que alquiló en la capital.
Uno de los ejes de la operación policial fue la denuncia del pasado 20 de julio de 2022 de la Comunidad de Propietarios del edificio donde vive Rafael Amargo. Avisaron que había un continuo tránsito de personas a ese piso y algunas de ellas se quedaban a dormir en los descansillos superiores. "En la actualidad dicho tránsito de personas a dicho piso no solo se ha mantenido constantemente sino que se han visto jeringuillas, papel albal y colillas en el portal de la finca", según el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli.
Con esta denuncia, el Juzgado de Instrucción número 27 de Madrid inició las diligencias con las actuaciones de la Sección de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito de Centro, que ya estaban tras las pistas de los sospechosos. La investigación comenzó bajo la sospecha de que Rafael Amargo estaba efectuando la venta y el tráfico de sustancias estupefacientes desde su casa. En los dispositivos policiales, los agentes comprobaron como, a diario y de forma constante, diversidad de personas accedían al domicilio y, tras permanecer unos minutos en el interior abandonaban el mismo de forma apresurada.
Visitas de toxicómanos
Los policías llegaron a identificar a algunos de los visitantes a los que encontraron metanfetamina. También acudían hasta ese edificio toxicómanos que se mostraban nerviosos con claros "síntomas de síndrome de abstinencia". Uno de ellos fue saludado en la calle por Rafael Amargo, que le introdujo en el interior de su domicilio. Los agentes llegaron a establecer vigilancias los días 24 de agosto, 8, 12, 19 de septiembre y 3, 6 y 10 de octubre. En todas ellas confirmaron estas visitas al artista.
Finalmente, el artista granadino de 48 años fue arrestado al terminar su actuación en la Sala Casanova de Alicante como presunto autor de un delito contra la salud pública y otro de atentado contra un agente de la autoridad. El bailaor se puso muy violento con los policías que acudieron al lugar para arrestarle.
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