El sustituto de Dolores Delgado en la cúpula de la Fiscalía, Álvaro García, llega a su nuevo cargo entre recelos dentro de una gran parte de la carrera fiscal de que continuará con la senda marcada por su antecesora. El hasta ahora jefe de la Secretaría Técnica tiene por delante el reto de apaciguar las aguas en una institución que se ha dividido enormemente en los años de mandato de Delgado, aunque una gran parte sospecha que optará por continuar con las políticas actuales.
La carrera tiene opiniones encontradas en relación a su mandato. Algunas fuentes fiscales consultadas por Vozpópuli sospechan que no se producirá el cambio esperado. Aseguran que no les inspira ninguna confianza su futuro nombramiento, tras el cese de Delgado, y recuerdan que ha sido su mano derecha hasta tal punto que se ha visto salpicado en polémicas que afectaban a la fiscal general. "Va a ser más de lo mismo", explican.
Memoria Democrática
Otros van más allá y sentencian: "A lo único que se ha dedicado es a ser el 'alter ego' de Delgado". Al respecto aluden a informaciones periodísticas que sitúan a Álvaro García en la reunión privada que mantuvo el año pasado Dolores Delgado con el director de Ok Diario Eduardo Inda.
Por su parte, Dolores Delgado se retira por motivos de salud aunque fuentes fiscales consultadas por este medio sostienen que podría optar a ser fiscal de Sala de la Fiscalía de Memoria Democrática. El proyecto de ley, aprobado la semana pasada en el Congreso de los Diputados, crea la plaza de Fiscal de Sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática. Esta figura, inédita hasta el momento, se encargaría de investigar "los hechos producidos durante la Guerra Civil y la Dictadura". Las mismas fuentes dan por hecho que esta plaza será para Dolores Delgado.
El nombre de Álvaro García saltaba a la palestra este martes tras conocerse el cese de la fiscal general por motivos de salud y su propuesta para sucederla en el cargo. El fiscal jefe de la Secretaría Técnica ha estado a la sombra de Delgado en todo este tiempo, pero muchos miembros de la carrera recelan de algunas de sus actuaciones, como la gestión en el conocido caso Stampa; el fiscal del caso Villarejo que les acusa de maniobrar para evitar que consiguiera plaza fija en la Fiscalía Anticorrupción.
Voto de confianza
De hecho, dos de las tres asociaciones de la carrera se muestran disconformes con el nombramiento. La mayoritaria Asociación de Fiscales (AF) sostiene en declaraciones a este medio que lo deseado hubiera sido una persona no tan vinculada al perfil de Delgado. La APIF, por su parte, dice que García Ortiz "ha sido corresponsable de todo aquello que ha merecido la crítica a la institución". "Participa sin matices del fracaso y desprestigio de la gestión de Delgado", recogen en una nota.
Es más de lo mismo, no nos inspira confianza porque es la mano derecha de Delgado y no ha habido transparencia en la FiscalíaFuentes fiscales contrarias a su nombramiento
No obstante, le otorgan un voto de confianza para revertir el rumbo, sobre todo en lo que respecta a la imagen de politización de la Fiscalía. Otras fuentes, sin embargo, definen a García Ortiz como una persona "muy amable" y un "estupendo jurista". "Va a ser acogido de forma muy pacífica porque tiene un gran reconocimiento dentro de la carrera", rezan estas otras fuentes que sostiene que tiene una personalidad distinta a la de Delgado y que destaca por su sensibilidad con temas sobre Derechos Humanos e Igualdad
"Mucha gente dice desde hace mucho tiempo que Álvaro tiene la carrera fiscal en la cabeza", explican. Además, recuerdan que fue uno de los candidatos que más votos ha obtenido en la historia cuando se presentó como vocal al Consejo Fiscal en 2018. Al respecto insisten en que va a tener que presentar su propio proyecto cuando comparezca ante la Comisión de Justicia del Congreso.
El trámite en cuestión se espera que no se demore en el tiempo. El Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal (EOMF) establece, en su artículo 29, que ahora tiene que conseguir el plácet del Consejo General del Poder Judicial y también comparecer ante la Comisión de Justicia del Congreso, donde se valorará su idoneidad. Una vez nombrado, prestará ante el Rey el juramento o promesa que previene la Ley y tomará posesión del cargo ante el Pleno del Tribunal Supremo.
Va a ser acogido de forma muy pacífica porque tiene un gran reconocimiento dentro de la carreraFuentes fiscales afines
A falta de conocer si el Congreso convoca la Comisión antes de agosto, lo que sí se ha confirmado es que el CGPJ se pronunciará mañana mismo, aprovechando el Pleno señalado, sobre el nombramiento de García Ortiz. De momento el elegido por el Gobierno cumple los requisitos formales de ser un jurista de reconocido prestigio y con más de 15 años de ejercicio de su profesión.
La herencia de Delgado
Pero más allá del aspecto técnico, tiene por delante la ardua tarea de unir a una carrera afectada en los últimos años por numerosas crisis internas. Aunque los afines a Delgado aplauden su gestión y la modernización de la institución, otros apuntan que ha provocado un daño irreparable al Ministerio Fiscal ante continuas críticas de politización del órgano.
De hecho, tanto la AF como la APIF han solicitado en numerosas ocasiones su dimisión desde que tomara posesión de su cargo en febrero de 2020. Una de ellas fue por su gestión en el caso Stampa, el fiscal que la acusa tanto a ella como a su sucesor de intervenir en la causa que tenía abierta en el TSJ de Madrid para dilatarla en el tiempo, a sabiendas de que se iba a archivar, y así hacerla coincidir con el Consejo Fiscal en el que se jugaba la plaza.
También polémicos han sido los episodios sobre los nombramientos discrecionales a fiscales afines de la progresista UPF, afines todos ellos a Delgado. Las asociaciones denuncian que de la treintena de unidades especializadas creadas bajo su mandato, se nombró en la mayoría de casos a fiscales de su misma asociación, sin valorar otros aspectos de los demás candidatos.
Su último Consejo Fiscal
Su cercanía con el Gobierno de Pedro Sánchez también le ha valido sospechas sobre su imparcialidad. Llegó al órgano salpicada en el caso Villarejo por el almuerzo que celebró con varios comensales, entre ellos, el comisario jubilado en 2009. Su vínculo afectivo con Baltasar Garzón, jefe del despacho de abogados que defiende a imputados en el caso Villarejo, también puso en la picota su actuación.
Del mismo modo hubo polémica con la investigación de la Fiscalía del Tribunal Supremo por las cuentas en el extranjero de Juan Carlos I o con los recientes ceses en la Fiscalía de Menores y de Extranjería. Incluso el Tribunal Supremo tumbó el nombramiento del fiscal de Sala de Menores, Eduardo Esteban, alegando que no lo había motivado lo suficiente. Ella lo defendió frente a otro candidato que tenía mas experiencia, el fiscal de Sala José Miguel de la Rosa.
Una de las últimas controversias que salpicó a la Fiscalía General del Estado se produjo cuando el PSOE introdujo en una reforma de la Ley Concursal una modificación clave sobre la figura del fiscal general. La carrera se revolvió ante este movimiento que implicaba ascender a la categoría de Fiscal de Sala del Tribunal Supremo (la máxima de la carrera) al fiscal general cuando cese de su cargo.
Muchos entendieron esta actuación como un giro del Gobierno para garantizar a Delgado una salida digna de la Fiscalía General del Estado. Su cese, acordado por motivos de salud, ha pillado por sorpresa a la carrera fiscal, aunque Delgado ha dejado algunas pistas con sus últimas actuaciones. Así, por ejemplo, a la vuelta de su baja tras someterse a una operación de espalda, convocó al nuevo Consejo Fiscal tras el triunfo aplastante de los vocales de la Asociación de Fiscales en las elecciones de mayo. Delgado pronunció un discurso de valoración de su mandato que algunos presentes lo entendieron como una despedida, más que como un saludo a los nuevos.
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